a 15 años de la muerte de «Raúl Reyes», un punto de quiebre para la guerrilla de las FARC

La muerte de «Raúl Reyes», alias de Luis Edgar Devia, ocurrió hoy hace 15 años en una operación militar lanzada desde Colombia en territorio ecuatoriano, marcó un punto de inflexión en la guerra contra las FARC al ser el primer miembro de esa dirección guerrillera asesinado por fuerzas estatales.

Aquel golpe de Estado del 1 de marzo de 2008, al que siguieron otras derrotas, puso fin al mito de más de 40 años de invulnerabilidad de los líderes de las FARC y allanó el camino para que esa guerrilla se sentara a negociar la paz que finalmente se firmó en 2016.

«Fue el comienzo de una debacle de la que las FARC no se recuperaron», dijo a Efe Mauricio Jaramillo Jassir, profesor de la Facultad de Estudios Internacionales, Políticos y Urbanos de la Universidad del Rosario en Bogotá.

El profesor agregó que la pérdida de Reyes fue «un golpe en el corazón de las FARC«, que sufrió otras derrotas militares en esos años como la muerte de los alias «Iván Ríos», «Mono Jojoy», «Domingos Biojó», «Martín Caballero», «El negro Acacio» y finalmente su máximo jefe, «Alfonso Canó».

A solo 26 días del atentado contra «Raúl Reyes», el fundador de las FARC, Manuel Marulanda Vélez, alias «Tirofijo», murió por causas naturales en las selvas del centro-sur del país.

El negociador Víctor G. Ricardo con Marulanda y Raúl Reyes. Foto EFE

el numero dos

reyes, considerado el número dos de las FARCmurió junto a otros 16 guerrilleros en la «Operación Fénix», bombardeo que se realizó el 1 de marzo de 2008 en su campamento ubicado en la selva de Santa Rosa de Sucumbíos, en Ecuador, cerca de la frontera con Colombia.

Al momento de su muerte, “Raúl Reyes” enfrentaba 121 procesos judiciales y tenía 57 expedientes por homicidio terrorista, 26 por terrorismo, 25 por rebelión, cuatro por secuestro y nueve por lesiones, además de catorce condenas.

También fue uno de los «objetivos de alto valor» para el Gobierno del entonces presidente colombiano Álvaro Uribe y se le realizó un riguroso seguimiento que, finalmente, permitió su localización por el teléfono satelital que utilizaba.

El campamento donde murió Raúl Reyes, en Ecuador.

conflicto diplomático

La operación militar en suelo ecuatoriano encabezó el entonces presidente de ese país, Rafael Correa, romper relaciones con colombia en la peor crisis entre ambos países en 200 años de historia común, y una medida similar tomó la Venezuela de Hugo Chávez.

Indignada por no haber sido informada con anterioridad de la operación militar, Correa expulsó al embajador de Colombia en Quito y retiró la suya de Bogotá, situación que se prolongó por más de dos años y medio hasta que la relación se restableció paulatinamente.

“Las relaciones han cambiado mucho porque se paralizaron cuando Colombia bombardeó territorio ecuatoriano. Colombia primero dijo que no había bombardeado territorio ecuatoriano, luego que las autoridades ecuatorianas se enteraron, dio muchas declaraciones contradictorias que desataron el lío diplomático”, explica. Jaramillo.

Sin embargo, durante la última década los gobiernos de Colombia y Ecuador relaciones comerciales intensificadas y de buena vecindad y el episodio de Angostura quedó como un tema incómodo que no volvió a ser tratado en comunicados oficiales.

El 11 de abril de 2000, el líder histórico de la guerrilla de las FARC, «Manuel Marulanda Vélez» (i), «Tirofijo», junto al abatido líder guerrillero Raúl Reyes. Foto EFE

“Las relaciones con Ecuador y Venezuela mejoraron con el presidente (Juan Manuel) Santos”, el sucesor de Uribe, quien restableció lazos con ambos países, explica Jaramillo.

Ecuador, que comparte una frontera de 586 kilómetros con Colombia, También ha sufrido las consecuencias del conflicto armado.

El vecino del sur es el país que acoge a la mayor cantidad de colombianos que huyen del conflicto, con unas 56.000 personas en condición de refugiados, según datos de la oficina en Quito del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).

A la fecha, la cooperación fronteriza se ha incrementado con acuerdos como el reciente compromiso de ambos presidentes de reforzar la vigilancia contra el narcotráfico y el crimen organizado, con base en evidencias de la presencia de disidentes de las FARC y otros grupos armados colombianos en territorio ecuatoriano.

Principio del final

Para cuando mataron a «Raúl Reyes», las FARC eran la organización guerrillera más antigua y numerosa de América Latina. con unos 17.000 miembros en armas.

Sin embargo, su muerte demostró que la estrategia del Estado para combatirlos, principalmente con bombardeos aéreos de sus campamentos, estaba dando resultados y se hablaba en ese momento de un “conflicto que había pasado de ser una guerra de guerrillas a un conflicto de posiciones«recuerda el experto.

«La muerte de Reyes confirmó el cambio en la correlación de fuerzas a favor del Estado colombiano. Significa que Colombia pudo hacer retroceder a la guerrilla» y llevarla a una mesa de negociaciones de paz, dijo Jaramillo.

Agencia EFE

pb

mira también

Salir de la versión móvil