Ocurrió en el museo Mauritshuis. Es el tercer hecho de este tipo de grupos que protestan contra el cambio climático.
Tres activistas medioambientales fueron detenidos este jueves en Holanda tras destrozar una conocida obra del artista Johannes Vermeer en el museo Mauritshuis para denunciar el calentamiento global.
Un video del momento se viralizó en redes sociales y muestra a uno de los activistas cuando se acerca al famoso cuadro «La niña de la perla»también conocida como la «Niña con turbante» o la «Mona Lisa holandesa», y pone pegamento en la pintura y apoya su cabezamientras otra persona vierte una lata de salsa de tomate.
Los dos activistas que aparecen en la imagen visten una camiseta blanca como miembros de la organización «Simplemente detén el petróleo».
“¿Cómo se siente ver algo tan hermoso y valioso aparentemente destrozado ante tus ojos? Nos sentimos indignados. Esta pintura está protegida por vidrio. Está bien, pero las personas vulnerables de todo el planeta no están protegidas. El futuro de nuestros hijos no está protegido. Las personas en extrema pobreza tienen que elegir entre calentarse o comer, y no están protegidas”, dice uno de ellos.
La policía holandesa ha confirmado la detención de tres personas implicadas en esta denuncia de emergencia climática, y están acusadas de “ataque abierto a los bienes artísticos”pero no está claro si la pintura en sí ha sido dañada por el pegamento o la salsa de tomate.
Mauritshuis en La Haya inmediatamente cerro sus puertas Después de lo que pasó.
El martes, un activista climático holandés, Jelle de Graaf, se sumó a la mesa de un estudio de televisión en Holanda para «hablar en vivo sobre la crisis climática y ecológica», durante un programa al que fue invitado para discutir nuevos métodos para llamar la atención sobre calentamiento global.
El programa buscó hablar sobre las recientes acciones de protesta de activistas climáticos que arrojaron comida contra cuadros históricos.
La semana pasada, dos simpatizantes del grupo alemán «Letzte Generation» («Última generación») arrojaron puré de papas a una pintura de Claude Monet que se exhibe en el Museo Barberini en Potsdam, cerca de Berlín.
Esa acción climática había tenido lugar una semana después de que los miembros de «Just Stop Oil» arrojaran sopa de tomate en «Girasoles» de Van Gogh en el Museo de la Galería Nacional de Londres. Ambas pinturas estaban detrás de un vidrio.
Con información de EFE