Para Yaremis, amiga del empleado que seguía desaparecido, la visita a Cuba del “presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (AMLO) tuvo que posponerse. En medio de tanto dolor, me pareció insensible y de mal gusto que el gobierno organizara un recibimiento a este señor con abundante comida y orquesta, en momentos en que el país debía estar de luto nacional”, dice, y luego pregunta: “¿O a quién sólo veneran los gobernantes es a sus muertos?
Ignorar el dolor de los demás.
Cuando murió Fidel, declararon por decreto nueve días de duelo nacional. Multaron a los ciudadanos que hicieran fiestas o escucharan música en sus casas. También prohibieron la venta de bebidas alcohólicas. ¿Las 43 muertes por el derrumbe (hasta ahora) no son de interés para el gobierno?
Se supo por la prensa mexicana que el presidente Miguel Díaz-Canel organizó un banquete con una amplia y variada carta de comida criolla y cocteles, amenizado por la Orquesta Faílde de Matanzas. Mientras AMLO y su esposa Beatriz Gutiérrez Müller escuchaban ‘Bonito y Sabroso’ de Benny Moré en el salón de recepciones del Palacio de la Revolución, en la colonia Mantilla, Arroyo Naranjo, Jorge, peluquero privado, hacía tres días hacía cola para ver si logró comprar dos litros de aceite vegetal.
“Cuando explote la caldera, los aviones no serán suficientes para que esta gente (los del régimen) se vaya del país. Díaz-Canel no tiene una pizca de sentido común. La gente, cuando puede, come caliente una vez al día y en lugar de declarar duelo nacional, hace una fiesta con su compadre mexicano. Le ronca la manilla”, dice Jorge.
Mijaíl, licenciado en Ciencias Políticas, señala que la visita de AMLO estaba programada desde hace meses. “Pero ante la tragedia debió hacer un gesto con los familiares de los fallecidos y heridos en la explosión de Saratoga y declarar públicamente que la intención de su visita era tratar temas migratorios, en este momento el problema que más afecta a las autoridades mexicanas. , porque cada mes aumenta el número de cubanos que ingresan irregularmente a su territorio”, dice y agrega:
Desafío a los Estados Unidos
“Los operadores políticos cubanos le dieron la vuelta magistralmente a la visita de AMLO. Y la impresión que queda es que vino a apoyar al gobierno, sobre todo porque al regresar a México desafió a la administración Biden, amenazando con no asistir a la Cumbre de las Américas en Los Ángeles si no se invita a los mandatarios de Cuba, Nicaragua y Venezuela. Un flaco favor que le hace a la democracia y en particular a los millonarios intereses económicos de México con Estados Unidos. Es curioso, cuando Trump estuvo en la Casa Blanca, quien incluso ofendió a los mexicanos llamándolos asesinos y violadores, AMLO no solo mantuvo un perfil bajo, sino que asumió dócilmente el papel de guardián de Estados Unidos para impedir el paso de inmigrantes”.
Raydel Fernández, financiero habanero radicado en Santo Domingo, República Dominicana, cree que “se debió suspender la visita de AMLO por el lamentable suceso en el Hotel Saratoga. El canciller Marcelo Ebrard estuvo en Washington pocos días antes de la visita de López Obrador a La Habana. El tema más importante que tocó Ebrard con Blinken y Mayorkas fue la inmigración, donde el régimen de Castro juega un factor importante en la complejísima ecuación y solución al caos que vive hoy la frontera sur de Estados Unidos”.
Fernández recuerda que semanas antes hubo una reunión en Washington entre funcionarios cubanos y estadounidenses, en la que el tema central y único fue la migración.
“La dictadura pretendió incluir otros temas en la agenda, pero todo indica que su pedido no prosperó. Sin duda, AMLO presionó al régimen para que dejara de enviar compatriotas que en su mayoría terminan en México. Las fotos que vi en Granma [órgano oficial del Partido Comunista] Las expresiones en los rostros de Díaz-Canel, el canciller Bruno Rodríguez y el general Álvaro López Miera, ministro de las FAR, no parecían positivas, más allá de la parte protocolaria y la condecoración de la Orden José Martí a López Obrador”.
Según Fernández, la dictadura está buscando, en cualquier lugar, que Biden los invite a la Cumbre de las Américas. “Ya han presionado a los países de CARICOM que emitieron un comunicado. Es probable que usen a AMLO para el mismo fin. En fin, la visita de López Obrador a Cuba transcurrió sin pena ni gloria en términos políticos y diplomáticos. Y no tuvo la aceptación de los cubanos, que hubieran preferido que se suspendiera”.
lo engatusaron
Giselle, licenciada en historia, piensa que “López Obrador fue engañado por el gobierno cubano. Como dicen los españoles, jugaron a la pelota con él, asegurándole que puede ser un factor importante en la coalición de izquierdistas agrupados en el Foro de Sao Pablo ante la ausencia de estadistas con influencia en el ámbito político de Estados Unidos. Creo que ese papel es genial para el mexicano. Ya metió la pata en 2019, en el 500 aniversario de la conquista de México por los colonizadores españoles, al enviar una carta al Rey de España Felipe VI, instándole a reconocer los desmanes cometidos durante la conquista y disculparse por ello”.
La historiadora afirma que AMLO se está haciendo un flaco favor “al defender también a los gobiernos de Venezuela y Nicaragua, porque son dictaduras y en el caso de Maduro, subraya, ha sido acusado por instituciones de la ONU de haber cometido asesinatos y abusos de la fuerza policial. El gobierno cubano tiene una estrategia contradictoria. Quiere ir a la Cumbre, pero no quiere pertenecer a la OEA. Como dijo Silvio Rodríguez, un personaje leal al régimen de La Habana, en estos 63 años, Cuba ha pasado de una revolución con apoyo popular a una contrarrevolución cada vez más aislada y con menos aceptación del pueblo. Un país que clama por la democratización. AMLO o está mal asesorado, o las autoridades cubanas lo engañaron. Pero esa actitud de mediador, descaradamente a favor del régimen lo considero un error político”.
Un disfraz
Jorge Enrique Rodríguez, periodista independiente, cree que “la visita de AMLO a La Habana es un intento de desviar la atención, disfrazándola con conversaciones sobre temas migratorios que, según dijeron, fue el motivo de esa visita. López Obrador repitió el mismo discurso de aquellas naciones de la OEA que desafiaron a Obama para que Cuba participara en la Cumbre de las Américas en Panamá, en 2015. Es curioso cómo en dos ocasiones, primero con Vicente Fox y ahora con López Obrador, el azteca nación ha sido la que ha conversado con el régimen en el marco de una Cumbre de las Américas. Aunque en distintas circunstancias, México ha jugado el papel de mayordomo. ¿Al servicio de quién? pregunta Rodríguez.
La respuesta no es clara. El presidente mexicano, por el romanticismo de una izquierda trasnochada, la presión de la dictadura verdeoliva o el antiamericanismo propio de un sector político de la región, juega a ser una piedra en el zapato de los intereses de la Casa Blanca. Los representantes de la rancia izquierda latinoamericana que adoraba a Fidel Castro, como los viejos rockeros, nunca mueren.