La cooperación sobre la repatriación de inmigrantes ilegales, la asistencia legal penal, el control de drogas, la lucha contra los delitos transnacionales y las conversaciones sobre el combate al cambio climático entre China y Estados Unidos están suspendidas, dice un informe del Ministerio de Relaciones Exteriores de China.
Asimismo, la Cancillería china informó de la cancelación de llamadas telefónicas entre los líderes de los comandos militares y de las reuniones de trabajo entre las carteras de Defensa de ambas potencias y las del Mecanismo de Consulta de Seguridad Marítima Militar.
La Cancillería también anunció hoy sanciones contra Pelosi y sus familiares directos por «ignorar la preocupación y firme oposición de China» a su viaje a Taiwán y por «socavar la soberanía e integridad territorial» del país asiático.
«Interferencia» de Estados Unidos en el Estrecho de Taiwán
El ministerio no proporcionó detalles específicos sobre las sanciones, pero acusó a Pelosi, quien visitó Taiwán el miércoles a pesar de las protestas de Beijing, de «interferir en los asuntos internos de China» y «amenazar la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán». «.
La semana pasada, cuando la visita de Pelosi era solo una posibilidad propuesta por los medios estadounidenses, el presidente chino, Xi Jinping, y su homólogo estadounidense, Joe Biden, tuvieron una llamada telefónica en la que Xi le pidió a Biden que «no jugara con fuego» con respecto a Taiwán.
En las últimas 48 horas, China, que calificó el viaje de Pelosi de «farsa» y «traición deplorable», ha respondido a la visita de la funcionaria a la isla con ejercicios militares a gran escala en el Estrecho de Taiwán y con sanciones económicas. contra algunos productos de la antigua Formosa.
Estados Unidos es el mayor aliado militar de Taiwán.
Los ejercicios militares, que incluyeron fuego real y el lanzamiento de misiles de largo alcance, fueron descritos el viernes por la presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen, como «un acto irresponsable». Pekín reclama la soberanía sobre la isla y considera a Taiwán una provincia rebelde desde que los nacionalistas del Kuomintang se retiraron allí en 1949, tras perder la guerra civil contra los comunistas.
La isla es también uno de los principales focos de conflicto entre China y Estados Unidos, principalmente porque Washington es el principal proveedor de armas de Taiwán y sería su mayor aliado militar en caso de guerra con China.
jov (ef, spiegel)