Las nuevas restricciones estadounidenses sobre las exportaciones de chips y artículos relacionados a China aprovechan el dominio estadounidense en áreas críticas de la cadena de suministro global de semiconductores y apuntan a estrangular el desarrollo de chips avanzados de China.
La industria de los semiconductores se ha caracterizado durante mucho tiempo por una cadena de suministro global altamente integrada. A lo largo de los años, sus altos costos de investigación y desarrollo y los gastos de capital intensivos han llevado a diferentes países a especializarse en diferentes pasos del proceso de fabricación de chips.
Fuente: WSJ