Aunque no ha cambiado el proceso de creación de velas o velas antiguas, Marco Antonio Garduño ha innovado y llevado el producto a otro nivel al crear figuras de calaveras, pan de muerto y frutaspara formar un altar en sí mismo o como piezas dentro de la ofrenda de Dia de los Muertos.
El artesano es la quinta generación dentro de su familia de cereros en Valle Tenangoen las afueras del sur de México, y que se enorgullece de hacer este producto que modestamente no quiere llamar arte.
El sexagenario admite que el crear estas figuras no es barato; sin embargo, supone que no se puede encontrar nada parecido en ningún otro lugar del país.
Para Marco Antonio, es fácil decir que desde el vientre ya trajo el conocimiento porque su madre se dedicaba a hacer velas además.
Para él su trabajo es muy gratificante y por eso le dedica varias horas para que quede casi perfecto. Cada pieza es única porque parte del moldeado, la forma de la figura que realizará y luego la decoración..
Para el artesano, cada pieza que se le compra es una oportunidad para que una familia invita a ser parte del altar que coloca para recibir a sus difuntos.
Sus creaciones han ido a más de 60 paísestodos son clientes, ya saben lo valiosas que son sus velas y acuden a él para enviárselas a sus seres queridos, amigos o conocidos.
Entre lo que ha hecho por el Dia de los Muertos está el pan de muerto, las calaveritas y diversas frutas de temporada y las típicas velas para los altares.
Las ceras cuestan entre 40 y 120 pesitos dependiendo del tamaño que llega hasta más de 10 centímetros. Para formar un altar solo con ellos, el costo alcanza los mil pesos.
MBL
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