El endeble PRD | El Heraldo de México

Con la disputa abierta para las elecciones de 2024, el PRD, un hermano menor dentro del Coalición “Va por México”, la selección de candidatos comienza a ser problematizada, específicamente en la Ciudad de México.

Tras las elecciones de 2021, dicha coalición se ha regodeado en avanzar dentro del otrora baluarte lopezobradorista y, en medio de la indefinición y los bajos perfiles del morenismo capitalino, centra sus esperanzas en una estrategia que le permita arrebatarle o al menos sacarle el máximo partido posible a la capital de la República.

No lo tienen fácil, y por eso, cualquier movimiento que no esté calculado puede desestabilizar los acuerdos y definiciones de la dirigencia en los tres partidos que, por ahora, han visto con ceja enarcada la revelación de que, en el marco de su informe de actividades Como legislador, el PRD realiza Luis Chazaro.

Lo hace en medio de las negociaciones de las candidaturas a diputados locales en Coahuila, donde ese deprimido PRD perdió el récord local en el intermedio local de 2020, al caer al noveno lugar de 11 fuerzas políticas, con apenas el 1.55% de los votos.

Asignarle dos candidaturas hoy en esa entidad es, en realidad, hacerles un favor. En este contexto, en la conducción del PRD de Jesús Zambrano No gustó nada la madrugada del diputado Luis Cházaro, quien utilizará su informe de trabajo que presentará hoy para anunciar que quiere sumarse a la lista de los que aspiran a abanderar la coalición Va Por México en la Ciudad de México.

Los propios «Chuchos», que sostienen en sus manos el escudo del sol azteca, saben que son la cuarta fuerza política en la capital del país, y tendrán pocas oportunidades de ganar la candidatura que, se ha anunciado, será encabezada por el PAN, la segunda entidad de fuerza política.

Y es que, más allá de madrugada, lo que se le ha recomendado al PRD es que centre sus aspiraciones en fortalecer al mejor candidato seleccionado por la alianza a través de la metodología acordada entre los partidos políticos que la conforman.

Los dirigentes del PRI-PAN-PRD saben que juntos y con el mejor candidato serán competitivos en las elecciones de la Ciudad de México, justo cuando las encuestas comienzan a darle cierta ventaja a la coalición a un año del proceso electoral.

Hoy, los exintegrantes de Izquierda Democrática, tribu asimilada al morenismo como «Movimiento por la Esperanza»han tenido una presencia importante en la ciudad, e incluso, luego del desastre sufrido en la alcaldía Cuauhtémoc, se reconfiguraron en la estructura de Bienestar, notablemente bajo el control de la chintolola «Brigada Roja» que, por su parte, continúa siendo un receptor de la sangría capitalina perredeísta.

En suma, el PRD es débil dentro de la alianza y fuera de ella, para no tener control sobre sus cuadros dirigentes.

POR ARTURO RODRIGUEZ GARCIA
COLABORADOR DE RADIO HERALDO
@ARTURO_RDGZ

MAÍZ

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