MADRID, 30 de abril (2021) –
La función de modo nocturno, presente en dispositivos con pantallas como teléfonos móviles inteligentes y que reduce la luz azul en favor de tonos naranjas, no mejora el sueño cuando se usa antes de dormir, contrario a lo que se creía hasta ahora.
Ésta es la principal conclusión de un estudio publicado en la revista académica Sleep Health, realizado por investigadores del Universidad Brigham Young (BYU), de Estados Unidos, según lo expresó la institución en un comunicado.
El estudio de BYU ha analizado el sueño de 167 adultos entre 18 y 24 años que usaban teléfonos celulares a diario, a quienes se les pidió que pasaran al menos ocho horas en la cama usando un sensor de acelerómetro en su muñeca para medir su sueño.
De ellos, a una parte de los participantes se les pidió que usar el móvil en modo noche, a otros que lo usarán pero sin activar este modo y el resto que no miraron el móvil.
Usando el acelerómetro, la investigación pudo medir la tiempo de sueño, calidad, tiempo de despertar y el tiempo que tardó la persona en dormirse en cada uno de los grupos.
«En toda la muestra, no hubo diferencias entre los tres grupos«, ha afirmado el profesor de psicología de PYU y autor del estudio, Chad Jensen, quien asegura que» el modo nocturno no es superior a usar el móvil sin modo nocturno o no usar el teléfono «.
Hasta ahora, se creía que los modos nocturnos, que mejoran la luz naranja y reducen la cantidad de luz azul, logran de esta manera no afecta la producción de melatonina Y tampoco interfiere con los ciclos del sueño.
Al no contemplar diferencias, el estudio dividió a todos los participantes en dos grupos: el que durmió unas siete horas, sobre las ocho horas recomendadas, y los que durmieron seis o menos.
Entre los segundos, no se apreciaron cambios, pero entre los que dormían menos, la investigación observó diferencias en la calidad del sueño en función del uso del móvil, ya que los que no usaron el móvil tuvieron una mejor calidad de sueño que los que lo usaron, ya sea con el modo nocturno activado o no.
Los resultados del estudio sugieren que no es solo la luz azul la que crea dificultad para dormir y empeora la calidad del sueño, sino que Se deben tener en cuenta otros factores, como la actividad psicológica, al escribir mensajes, deslizar o publicar.
«Aunque hay mucha evidencia que sugiere que la luz azul aumenta el estado de alerta y dificulta el sueño, Es importante pensar cuánto de esta estimulación se debe a la emisión de luz en comparación con otras estimulaciones cognitivas y psicológicas.«, ha concluido Jenssen.