El papa Francisco, que se ocupa de las dolencias propias de la edad y no descarta dimitir por motivos de salud, prepara su sucesión con la investidura, este sábado, de 20 nuevos cardenales, 16 de ellos con derecho a voto en el cónclave para la elección de sucesor del pontífice argentino.
El Papa, de 85 años, convocó a todos los cardenales del mundo a una reunión de dos días sin precedentesque tendrá lugar después de la «creación» -ese es el término religioso- de los 20 nuevos «príncipes de la Iglesia».
La ceremonia de investidura de los nuevos cardenales tendrá lugar durante una ceremonia solemne en la Basílica de San Pedro en el Vaticano.
Dedicado a la reforma de la Constitución Pontificia, aprobada en marzo y en vigor desde el 5 de junio, la convocatoria de cerca de 300 cardenales se trata de una especie de precónclave, durante el cual se hará un balance de la situación de la iglesia tras casi 10 años de liderazgo del Papa latinoamericano.
La creación de nuevos cardenales en noviembre de 2016, en la Basílica de San Pedro. Foto: REUTERS
especulaciones
El encuentro también ha desatado todo tipo de especulaciones, en particular sobre el estado de salud del Papa, que fue operado del colon en 2021 y sufre un dolor en la rodilla derecha que le impide caminar y le obliga a utilizar una silla de ruedas.
Francisco tampoco descartó la posibilidad de dimitir por problemas de salud, según admitió a finales de julio ante los periodistas que le acompañaron en su viaje a Canadá.
“Cambiar al Papa no sería una catástrofe”, les dijo, aunque explicó: “No he pensado en esa posibilidad, pero eso no quiere decir que pasado mañana no lo piense”.
Y agregó: «La puerta está abierta».
Con la investidura de los nuevos cardenales, el primer Papa latinoamericano de la historia propone para su sucesión religiosos de las periferias del mundoseguramente más abierto, menos acostumbrado a las intrigas de la Curia romana.
Rostros de África, Asia y América Latina
Varios de ellos son de Brasil, Paraguay, India, Singapur, Mongolia y Timor Oriental.
En la lista de 16 cardenales menores de 80 años, con derecho a voto en caso de cónclave por renuncia o muerte del Papa, figuran tres latinoamericanos: dos brasileños y un paraguayo, el Arzobispo de Asunción.
Un cuarto, colombiano, tiene más de 80 años y por tanto no podrá participar en la elección del futuro pontífice.
El Papa Francisco, este miércoles, ante la audiencia general, en el Vaticano. Foto: ANSA
Al final de su octavo consistorio, casi uno por cada año de papado, ya que En marzo cumple 10 años al frente de la IglesiaFrancisco habrá elegido 83 cardenales del total actual de 132 electores, es decir, casi dos tercios.
Cifra determinante en caso de elección del futuro Papa, ya que se requiere precisamente una mayoría de dos tercios.
Fiel a su línea a favor de una Iglesia más social, menos europea, más cercana a los olvidados, el Papa nacido en Argentina eligió a dos africanos y cinco asiáticos, incluidos dos indios, confirmando el ascenso de ese continente.
Entre los nombramientos más destacados está el del estadounidense Robert McElroy, obispo de San Diego, en California, considerado un progresivo por sus posiciones sobre los católicos homosexuales y el derecho al aborto.
Otra cita emblemática es la del misionero italiano Giorgio Marengo, que trabaja en Mongolia. Será el cardenal más joven del mundo con tan solo 48 años.
Tres futuros cardenales ocupan cargos en la Curia, el gobierno central de la Iglesia: el británico Arthur Roche, el coreano Lazzaro You Heung-sik y el español Fernando Vérgez Alzaga, presidente de la gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano.
Inicialmente designado, el belga Lucas Van Looy, de 80 años, obispo emérito de Gante, pidió ser dispensado de este título debido a las críticas a su manejo de los abusos sexuales por parte de miembros del clero.
Según el rito, los futuros cardenales se arrodillarán ante el Papa para recibir el gorro cardenalicio rojo, color que recuerda la sangre que Cristo derramó en la cruz.
La ceremonia será seguida por la tradicional «visita de cortesía» al Vaticano, que permite a los romanos saludar personalmente a los nuevos cardenales.
Fuente: AFP
CB
El papa Francisco, que se ocupa de las dolencias propias de la edad y no descarta dimitir por motivos de salud, prepara su sucesión con la investidura, este sábado, de 20 nuevos cardenales, 16 de ellos con derecho a voto en el cónclave para la elección de sucesor del pontífice argentino.
El Papa, de 85 años, convocó a todos los cardenales del mundo a una reunión de dos días sin precedentesque tendrá lugar después de la «creación» -ese es el término religioso- de los 20 nuevos «príncipes de la Iglesia».
La ceremonia de investidura de los nuevos cardenales tendrá lugar durante una ceremonia solemne en la Basílica de San Pedro en el Vaticano.
Dedicado a la reforma de la Constitución Pontificia, aprobada en marzo y en vigor desde el 5 de junio, la convocatoria de cerca de 300 cardenales se trata de una especie de precónclave, durante el cual se hará un balance de la situación de la iglesia tras casi 10 años de liderazgo del Papa latinoamericano.
La creación de nuevos cardenales en noviembre de 2016, en la Basílica de San Pedro. Foto: REUTERS
especulaciones
El encuentro también ha desatado todo tipo de especulaciones, en particular sobre el estado de salud del Papa, que fue operado del colon en 2021 y sufre un dolor en la rodilla derecha que le impide caminar y le obliga a utilizar una silla de ruedas.
Francisco tampoco descartó la posibilidad de dimitir por problemas de salud, según admitió a finales de julio ante los periodistas que le acompañaron en su viaje a Canadá.
“Cambiar al Papa no sería una catástrofe”, les dijo, aunque explicó: “No he pensado en esa posibilidad, pero eso no quiere decir que pasado mañana no lo piense”.
Y agregó: «La puerta está abierta».
Con la investidura de los nuevos cardenales, el primer Papa latinoamericano de la historia propone para su sucesión religiosos de las periferias del mundoseguramente más abierto, menos acostumbrado a las intrigas de la Curia romana.
Rostros de África, Asia y América Latina
Varios de ellos son de Brasil, Paraguay, India, Singapur, Mongolia y Timor Oriental.
En la lista de 16 cardenales menores de 80 años, con derecho a voto en caso de cónclave por renuncia o muerte del Papa, figuran tres latinoamericanos: dos brasileños y un paraguayo, el Arzobispo de Asunción.
Un cuarto, colombiano, tiene más de 80 años y por tanto no podrá participar en la elección del futuro pontífice.
El Papa Francisco, este miércoles, ante la audiencia general, en el Vaticano. Foto: ANSA
Al final de su octavo consistorio, casi uno por cada año de papado, ya que En marzo cumple 10 años al frente de la IglesiaFrancisco habrá elegido 83 cardenales del total actual de 132 electores, es decir, casi dos tercios.
Cifra determinante en caso de elección del futuro Papa, ya que se requiere precisamente una mayoría de dos tercios.
Fiel a su línea a favor de una Iglesia más social, menos europea, más cercana a los olvidados, el Papa nacido en Argentina eligió a dos africanos y cinco asiáticos, incluidos dos indios, confirmando el ascenso de ese continente.
Entre los nombramientos más destacados está el del estadounidense Robert McElroy, obispo de San Diego, en California, considerado un progresivo por sus posiciones sobre los católicos homosexuales y el derecho al aborto.
Otra cita emblemática es la del misionero italiano Giorgio Marengo, que trabaja en Mongolia. Será el cardenal más joven del mundo con tan solo 48 años.
Tres futuros cardenales ocupan cargos en la Curia, el gobierno central de la Iglesia: el británico Arthur Roche, el coreano Lazzaro You Heung-sik y el español Fernando Vérgez Alzaga, presidente de la gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano.
Inicialmente designado, el belga Lucas Van Looy, de 80 años, obispo emérito de Gante, pidió ser dispensado de este título debido a las críticas a su manejo de los abusos sexuales por parte de miembros del clero.
Según el rito, los futuros cardenales se arrodillarán ante el Papa para recibir el gorro cardenalicio rojo, color que recuerda la sangre que Cristo derramó en la cruz.
La ceremonia será seguida por la tradicional «visita de cortesía» al Vaticano, que permite a los romanos saludar personalmente a los nuevos cardenales.
Fuente: AFP
CB