El cargador magnético de Apple se convertirá en Qi2, un nuevo estándar para unificar un mercado plagado de siglas.
A pesar de la comodidad de la carga inalámbrica, uno de los problemas que esconde esta tecnología es la cantidad de estándares que hay en el mundo. Incluso cada marca tiene la suya. Uno de los más eficientes es MagSafe, que es exclusivo del iPhone. Aunque este año podría irse al lado de Android.
El sistema de carga MagSafe consta de una batería externa que se conecta magnéticamente a la parte posterior del dispositivo y tiene una capacidad de hasta 15W de potencia. Una carga inalámbrica rápida que, a diferencia de otras, garantiza una conexión estable.
El Wireless Power Consortium (o WPC) anunció un nuevo estándar de cargaQi2, que permitirá que los nuevos smartphones Android dispongan de baterías externas similares a las que utiliza el iPhone.
El cuerpo quiere acabar con el cargar acrónimo que abunda en este campo. Ya que lo único que se consigue con estas variantes es alienar al consumidor por miedo a equivocarse en la compra.
“Los consumidores y minoristas nos han estado diciendo que están confundidos acerca de qué dispositivos tienen certificación Qi y qué dispositivos afirman estar habilitados para Qi pero no tienen certificación Qi. Esta confusión puede conducir a una mala experiencia de usuario e incluso a problemas de seguridad”, explica Paul Struhsaker, CEO de WPC.
El estándar Qi2 vendría a reemplazar a su predecesor (Qi), en un mercado en rápida expansión donde se venderán alrededor de mil millones de dispositivos (transmisores y receptores) en todo el mundo para 2023.
Más allá de las mejoras prometidas en esta nueva versión, su lanzamiento será más importante que nunca, porque ampliará el mercado a una amplia gama de dispositivos.
El organismo asegura que el nuevo estándar tendrá «eficiencia e interoperabilidad mejoradas», lo que permitirá carga más rápida para algunos dispositivos.
La tecnología MagSafe es una evolución de Qi con una serie de imanes. Apple, que intentaba mantener el control sobre esa opción, ha decidido liberarla. Como miembro del WPC, está impulsando el desarrollo del nuevo estándar Qi, que se llamará Qi2 y que adaptará muchas de las virtudes de la tecnología MagSafe para abrirla a todos los dispositivos.
En busca de un estándar
Tanto Apple como Samsung ya están trabajando en dispositivos que sean compatibles con el nuevo estándar, aunque primero falta concretar la especificación del estándar, algo que sucederá a mediados de año. También se espera la llegada de las baterías adhesivas.
La primera versión buscará adaptar la tecnología de Apple y ampliar su espectro. Qi2 seguirá centrándose en dispositivos móviles y probablemente limitará la potencia de carga a 15 W. Pero tan pronto como se publique la especificación, comenzará el trabajo en la próxima versión, que tiene como objetivo ofrecer potencias de carga significativamente más altas.
Sin embargo, el Qi2 no va a tener la mismo patrón de imanes que se utiliza en los conectores MagSafe certificados por Apple, por lo que no está claro si los futuros cargadores Qi2 serán compatibles con los iPhone actuales habilitados para MagSafe.
También habrá un mecanismo de certificación para garantizar una buena experiencia de usuario, pero eso también podría causar que ciertos cargadores se nieguen a funcionar con ciertos dispositivos.
SL