La ciudad boliviana de La Paz fue escenario este martes (02.08.2022) de enfrentamientos callejeros entre policías y productores de hoja de coca en una disputa por el control de la codiciada comercialización de la planta, que dejó a uniformados heridos y a un periodista lesionado, informaron varios fuentes.
Varios cientos de campesinos, agrupados en la Asociación de Productores de Coca (Adepcoca) y opositores al gobierno del izquierdista presidente Luis Arce, protestaron en un barrio al norte de la ciudad de La Paz, para exigir el cierre de un mercado paralelo de la planta que él acusa de ser ilegal y de contar con el apoyo del gobierno.
Los campesinos marcharon primero hacia la sede del mercado oficial, pero estaba custodiado por un nutrido contingente de antidisturbios.
«Estamos pidiendo que se cierre de inmediato este supuesto mercado de venta de coca, que no tiene nada que ver con el mercado legal de Adepcoca, no tendremos miedo, si quieren que seamos ‘baleares’ [disparar] aquí estamos presentes”, arengó con un megáfono el dirigente cocalero Carlos Choque.
Petardos y gases lacrimógenos
Luego los campesinos comenzaron a lanzar petardos y artefactos explosivos de baja intensidad conocidos como casquillos de dinamita, lo que obligó a los uniformados a responder con el uso profuso de gases lacrimógenos, constató AFP.
En los incidentes que duraron más de una hora, los campesinos continuaron lanzando piedras y petardos y formaron barricadas en las calles, con llantas de caucho y pedazos de madera.
Un campesino que no quiso ser identificado mostró a la prensa cartuchos de balas de goma y aseguró que fueron atacados con estas armas no letales. Un civil también fue detenido por la policía y un periodista resultó herido en un brazo tras ser alcanzado por un petardo.
Un parte policial parcial decía en la tarde: «Tenemos varios policías lesionados por la onda expansiva de las dinamitas que nos arrojaron agresivamente».
un mercado jugoso
Dirigentes de Adepcoca dijeron que no descansarán hasta que cierre el mercado y que seguirán con sus protestas.
El conflicto entre los dos cocaleros de la región subandina de Yungas es por el control del lucrativo mercado de la planta, que se estima mueve unos 173 millones de dólares al año.
Un conflicto similar tuvo lugar entre septiembre y octubre de 2021 y dejó 38 civiles y 29 policías heridos, así como casi 70 personas detenidas, según un informe de la Defensoría del Pueblo estatal.
jc (afp, página siete)