Después de 10 años de matrimonio, ya estoy que tiro la esponja. O sea, en realidad debería decir “tiramos”, porque con mi señora…
Doctor Cariño:
Después de 10 años de matrimonio, ya estoy que tiro la esponja. O sea, en realidad debería decir “tiramos”, porque con mi señora no pudimos tener hijos y nos gastamos hasta lo que no teníamos con tal de haber cumplido nuestro sueño. Lo penca es que pese a que yo amo con toda mi alma a mi mujer, ella está convencida que el pistola de agua soy yo y huelo que está pensando en separarse para poder traer una guagüita a este mundo. Es dolorosa la situación, pero necesito que alguien me diga qué hacer. ¿La dejo libre para que cumpla su fantasía o doy la última pelea? Espero su respuesta.
Ernesto
Don Erne:
Creo que, lamentablemente, se está quedando solo en esta pelea y así no se puede. No va a ser la primera ni la última pareja en no poder encargar una bendición a la cigüeña, pero por lo que me cuenta sólo usted es el que está a cabezazos con la pared. Y así no funciona la cosa. Ahora, no entiendo por qué su esposa da por hecho que usted es el que tira puro aire. ¿Se lo confirmó el doctor? ¿Es una suposición? Si es así, incluso podrían haber adoptado, ¿no? Ahora, si ella está pensando en cumplir el sueño solita es porque ya no esté pensando como un matrimonio. Usted se nota un buen gallo y si una conversación a calzón quitado no sana el tema, tal vez sea mejor dar vuelta la página.
Tus consultas y dramas de tipo amoroso pueden aparecer en la Ventanita Sentimental si las mandas a doctorcarino@lacuarta.com.
