En la cumbre de la Celac llamaron a defender la democracia. Y criticaron duramente al líder nicaragüense, Daniel Ortega, por la persecución a los disidentes.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, criticó este martes en Buenos Aires a su homóloga peruana, Dina Boluarte, por la represión de las protestas que ya han dejado alrededor de 60 muertos en Perú, y subrayó «la urgente necesidad de un cambio de rumbo» en el país andino.
Al mismo tiempo, su homólogo de Colombia, Gustavo Petro, alzó la voz para exigir que se fortalezca el sistema interamericano de derechos humanos y se llegue a un «pacto democrático».
“No podemos quedarnos indiferentes cuando hoy en nuestra hermana República del Perú, con el gobierno al mando de Dina Boluarte, personas que salen a marchar, a exigir lo que consideran justo, terminan siendo fusilados por quienes deben defenderlos”. dijo durante su discurso. en la VII Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), en Buenos Aires.
El mandatario calificó de «inaceptable» el ingreso violento de policías a la Universidad Mayor de San Marcos en Lima, que culminó con más de 200 detenciones el pasado fin de semana, y -en su opinión- revivió «los tristes escenarios de la época de las dictaduras». del Cono Sur”, según un comunicado de la Presidencia de Chile.
Ante estos «atropellos», subrayó la necesidad de contribuir en todos los espacios multilaterales a acompañar un «diálogo incluyente, capaz de construir gobernabilidad democrática y garantizar el respeto de los derechos humanos».
“Señalamos la urgente necesidad de un cambio de rumbo en el Perú porque el saldo que ha dejado el camino de la represión y la violencia es inaceptable para los que defendemos, y no me cabe duda que aquí en la Celac esa voluntad es abrumadoramente mayoritaria, la democracia y los derechos humanos», dijo.
Boric también citó el atentado golpista contra la sede del poder en Brasilia, el 8 de enero, y afirmó que la democracia está «en riesgo» tanto en la región como en el mundo. Palabras más o menos, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, anfitrión del encuentro, lanzó la misma advertencia en la apertura.
En ese sentido, Boric pidió que se activen mecanismos desde la Celac y otros foros multilaterales para prever y apoyar la «plena e irrestricta vigencia de los derechos humanos y el Estado de derecho».
“Profundizar la democracia es un ejercicio permanente que requiere que quienes somos líderes políticos amplifiquemos nuestra capacidad de escuchar al pueblo”, argumentó el presidente chileno.
Críticas a Nicaragua
En ese sentido, señaló el «deber» del gobierno de Nicaragua de Daniel Ortega -uno de los ausentes de la cumbre- de avanzar hacia la libertad de los presos políticos porque, en sus palabras, solo con libertad y dignidad se puede fortalecer la democracia. y el bienestar de los pueblos.
El presidente chileno defendió, a la vez, el papel de espacios multilaterales como la Celac como herramienta para la «protección de la democracia y los derechos humanos frente al avance de liderazgos populistas y autoritarios».
«La política de exclusión no ofrece resultados auténticos ni duraderos», dijo Boric, quien citó como ejemplos los «vergonzosos» bloqueo estadounidense a cuba y, más recientemente, a Venezuela.
En la misma línea, calificó la cumbre celebrada este martes en Buenos Aires como un «motivo de esperanza», ya que consideró que la región «tiene mucho que contarle al mundo».
“Para fortalecer nuestra posición en el mundo, es fundamental que seamos capaces de coordinarnos y colaborar más y mejor”, dijo el presidente.
“Ha sido un año en el que hemos podido comprobar que, gracias al liderazgo argentino, la vigencia de la Celac como el único foro de la región que reúne a 33 países de América Latina y el Caribe, sirve, sirve, nos ayuda. como región», indicó el mandatario de centroizquierda.
Las palabras de Gustavo Petro
El presidente de Colombia, por su parte, expresó ideas similares a las de Boric, con quien mostró fuerte sintonía en varias ocasiones.
“¿Por qué tenemos que seguir manteniendo violaciones al sistema interamericano a pesar de que nuestros gobiernos firmaron el tratado en el pasado? en esta mesa?» se preguntó Petro.
El presidente colombiano consideró que es hora de que el sistema interamericano, colocado «en orden para el siglo XXI», permita un «pacto democrático donde la derecha y la izquierda no crean que cuando llegan al poder es para eliminar fisicamente a su oponente«.
«Aquí tiene que haber un pacto democrático como se planteó en 1972. Si llegamos al poder desde la izquierda, no es para encarcelar a la derecha. En América Latina no debe haber un solo preso político», remarcó.
“Pero si la derecha llega al poder no es para matar a la izquierda, no es más que la convivencia y la pluralidad ideológica, lo que nos permite sostenernos en paz en la región que ha visto las peores dictaduras y que ha sufrido las guerras del La revolución sumó a Petro, ex guerrillero del extinto movimiento M-19, que asumió el poder en agosto del año pasado.
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