Aunque la guerra de Rusia contra Ucrania ha perdido notoriedad en esta parte del mundo, no nos dejemos engañar. La contienda continúa y mueve la agenda internacional, a pesar de que no se observan cambios sustanciales en el frente ruso-ucraniano. Si bien se libra una guerra de desgaste, es en el terreno diplomático donde se producen los mayores movimientos.
Los últimos viajes al exterior del presidente Volodimir Zelensky marcan el inicio de una nueva etapa en el acercamiento de Ucrania al mundo. Durante los cinco meses transcurridos desde la primera salida de Zelensky de la Ucrania invadida por Rusia, el presidente viajó solo a países aliados. Después de Estados Unidos, estuvo en Reino Unido, Polonia, Alemania, Holanda, Bélgica e Italia.
Ante ello, en la última semana, Zelenski optó por abandonar el cómodo y seguro espacio transatlántico para participar en la cumbre de la Liga de Países Árabes organizada por Arabia Saudí en Yeda. Su príncipe, Mohamed bin Salman, que busca mejorar la imagen internacional del país, ayudó a gestionar el intercambio de prisioneros entre Rusia y Ucrania. En Arabia Saudita, Zelenski presentó su propuesta de paz para Ucrania a los líderes de los 22 países miembros de esta organización, varios de ellos simpatizantes o aliados directos de Rusia. Pero lo que más eco generó fue sin duda la presencia de Zelenski en la cumbre del G7 en Hiroshima, Japón.
Es en este contexto que Estados Unidos anunció su consentimiento para el entrenamiento de pilotos ucranianos en el manejo de aeronaves de cuarta generación, incluido el F16 estadounidense. Es una gran noticia para Ucrania que en la segunda mitad del año quizás pueda recibir estos aviones de algún país europeo. Recordemos que unos tres mil aviones F16 están actualmente en uso en 25 países. Por otro lado, destacó la extensa agenda de reuniones bilaterales del presidente ucraniano, tanto con países amigos como con los países del llamado Sur Global que siguen manteniendo buenas relaciones con Rusia. Las fotos del encuentro del presidente ucraniano con el primer ministro de India, Nerendra Modi, y con el presidente de Indonesia, Joko Widodo, pasarán a la historia.
Si bien una reunión de alto nivel no es suficiente para cambiar su posición sobre la guerra, la diplomacia directa de Zelensky sí sirve al menos para presentar la perspectiva del país invadido frente a la narrativa rusa llena de manipulaciones. Finalmente, a esta ofensiva diplomática de Zelenski hay que sumar la muerte del plan de paz para Ucrania propuesto por el presidente de Brasil, Lula da Silva. El que tanto habló de la paz para Ucrania, optó por no reunirse con Zelensky por supuestos problemas de agenda. Lula no dijo una palabra sobre su propio plan de paz para Ucrania. Más bien, criticó a otros por no visibilizar otras guerras con la misma fuerza. La muerte del plan de paz brasileño para Ucrania ocurrió por voluntad del presidente Lula, que nadie lo dude.
POR LA BENDITA WOJNA
PROFESOR DE RELACIONES INTERNACIONALES
TECNOLOGIA MONTERREY
@BEATAWOJNA
LSN
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