Solo Estados Unidos e Israel votaron en contra de la resolución que se presenta cada año. Brasil y Ucrania se abstuvieron.
La Asamblea General de la ONU aprobó este jueves por abrumadora mayoría una nueva resolución para exigir el fin del embargo de Estados Unidos contra Cuba, impuesto hace 60 años. Los únicos que votaron en contra fueron Estados Unidos e Israel.
Esta convocatoria, que se realiza todos los años desde hace tres décadas y siempre sale adelante con abrumadoras mayorías, recibió en esta ocasión 185 votos a favor, 2 en contra y 2 abstenciones, de Brasil y Ucrania.
Hace un año, la resolución había sido aprobada con 184 votos a favor, 2 en contra (EEUU e Israel) y 3 abstenciones (Colombia, Ucrania y Emiratos Árabes Unidos).
En 2016, durante el acercamiento entre Cuba y Estados Unidos durante la Administración de Barack Obama, EE.UU. incluso se abstuvo y permitió que el documento fuera adoptado sin oposición. Pero volvió al «no» con el gobierno republicano de Donald Trump y hasta ahora lo ha mantenido de la mano del demócrata Joe Biden.
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, al presentar el texto, denunció este jueves que el bloqueo es un «acto deliberado de guerra económica» y que tiene un efecto similar al de «una pandemia permanente, un huracán constante».
Impuesto en 1962 en plena Guerra Fría por el entonces presidente estadounidense John F. Kennedy, el bloqueo que se ha ido recrudeciendo progresivamente hasta sofocar al régimen comunista.
Rodríguez subrayó además que desde 2019, cuando el gobierno de Trump endureció las sanciones, esta política tiene “una dimensión extrema, más cruel e inhumana, de infligir deliberadamente el mayor daño posible a las familias cubanas”.
“No le atribuimos al bloqueo todas las dificultades que enfrenta hoy nuestro país, pero sería falso quien negara sus gravísimos efectos y no reconociera que es la causa principal de las penurias, carencias y sufrimientos de las familias cubanas”, dijo. insistió.
Mensaje a Joe Biden
El canciller cubano utilizó el altavoz de la ONU para enviar un mensaje a Biden, quien hasta ahora no ha ha impulsado cambios importantes en las políticas de su predecesor en este ámbito.
“El actual gobierno de Estados Unidos no tiene una política propia hacia Cuba. Actúa por inercia y continúa con la inhumana política de máxima presión instaurada durante la Presidencia de Donald Trump”, criticó.
Cuba, dijo, está dispuesta a «avanzar hacia un mejor entendimiento» con Estados Unidos y «desarrollar relaciones civilizadas y de cooperación, basadas en el respeto mutuo y sin atentar contra nuestra soberanía».
La delegación estadounidense, que tomó la palabra para explicar su voto negativo, aseguró que su política busca apoyar al “pueblo cubano en su búsqueda de libertad, prosperidad y un futuro con más dignidad”.
En ese sentido, Washington denunció la represión a la oposición por parte del gobierno cubano, al que instó a «escuchar» a los ciudadanos y permitirles «determinar su propio futuro».
Como es costumbre, Cuba recibió mensajes de solidaridad de decenas de países, especialmente de naciones latinoamericanas y caribeñas, africanas y asiáticas.
La lista negra
En el debate de este año, además de reiteradas declaraciones sobre la injusticia e ilegalidad del embargo, muchos países pusieron especial énfasis en la necesidad de que Cuba sea eliminada de la lista estadounidense de estados patrocinadores del terrorismoen un momento en que Washington está revisando el tema.
Cuba había sido sacada de esa lista en 2015, en la etapa de deshielo que se vivió durante la administración Obama, pero volvió en 2021 bajo Trump.
Rodríguez denunció que esta «medida letal» es totalmente injusta e inadmisible y que está elevando exponencialmente el llamado riesgo país y obligando a pagar precios mucho más altos por cualquier mercancía importada.
Por ello, pidió a Biden que corrija la actuación de Trump, ya que “sería moralmente correcta y conforme a la ley”.
Fuente: EFE y AFP
CB