El portavoz denunció que han comenzado a llegar a Ucrania instructores y equipos militares de la OTAN, donde ya se encuentran apostados «varios miles» de asesores. «Poco a poco la OTAN va penetrando en el territorio de Ucrania y luego, solo quedará para formalizar este proceso», subrayó.
«Al mismo tiempo, nadie reprocha a Ucrania por preparar una agresión contra su propio pueblo en Donbas», enfatizó en relación a los enfrentamientos entre el ejército ruso y las repúblicas separatistas del este de Ucrania.
Las autoridades de Rusia y Ucrania han subido el pulso político en las últimas semanas con acusaciones cruzadas sobre una inminente ofensiva militar, en un nuevo recrudecimiento de la tensión que ha existido desde que comenzó la rebelión separatista en 2014 en Donbas y Moscú proclamó la anexión de la península de Crimea.
Kiev estima que hay alrededor de 122.000 militares rusos posicionados a unos 200 kilómetros de la frontera, a los que se sumarían más de 143.000 a una distancia de 400 kilómetros. Moscú se defiende y, entre avisos de nuevos despliegues, sostiene que tiene derecho a movilizarse ante el acercamiento ucraniano a la OTAN.
El presidente ruso, Vladimir Putin, declaró en una conferencia de prensa el jueves que «Ucrania puede estar preparándose para una operación militar».
El gobierno ucraniano, por su parte, ha negado las acusaciones. «La declaración del presidente ruso sobre la supuesta preparación de una operación militar en Donbas es falsa», dijo Oleh Nikolenko, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania.
En este sentido, Nikolenko subraya que las autoridades ucranianas, encabezadas por el presidente Volodimir Zelenski, solo buscan la paz y siguen apostando por la diplomacia para resolver el conflicto.
El aumento de tropas rusas cerca de la frontera con Ucrania también ha generado todo tipo de sospechas en el escenario internacional. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, advirtió a Putin que una hipotética intervención militar no quedará impune.