Un viaje de la vicepresidenta Kamala Harris al sudeste asiático le dará a la administración Biden la oportunidad de volver a centrarse en contrarrestar a China en un momento en que la salida caótica de Estados Unidos de Afganistán está planteando dudas sobre la confiabilidad de Washington como aliado.
La Sra. Harris parte el viernes hacia Singapur y Vietnam, visitas que serán la culminación de meses de alcance diplomático en la región, lo que subraya un cambio en las prioridades de la guerra contra el terrorismo hacia la contención de poderes competidores.
Durante su viaje, se espera que Harris se concentre en la salud global, las asociaciones económicas y la seguridad en la región, según altos funcionarios de la administración. Ella pronunciará un discurso en Singapur detallando su visión para el Indo-Pacífico y lanzará una oficina regional en el sudeste asiático para los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. En Vietnam.
La Sra. Harris también se reunirá con funcionarios gubernamentales y líderes empresariales para hablar sobre los problemas de la cadena de suministro. La administración de Biden ha estado trabajando para abordar la escasez global de semiconductores, que ha provocado una ralentización de la producción desde electrodomésticos hasta computadoras y automóviles.
Un aumento en los casos de Covid-19 en la región en gran parte no vacunada también ha llevado a cierres en países como Vietnam, Tailandia y Malasia, los principales exportadores de productos electrónicos y otros productos, que forzaron el cierre de fábricas e interrumpieron aún más las cadenas de suministro globales. Los representantes empresariales estadounidenses han presionado a la administración Biden para que acelere la ayuda a la región.
Fuente: WSJ