Las rocas en el asteroide Ryugu son sorprendentemente esponjosas, según la sonda Hayabusa2 de Japón

Los cantos rodados en los asteroides pueden ser tres cuartos huecos o más, un descubrimiento que podría ayudar a obtener información sobre la forma en que se formaron la Tierra y otros planetas, según un nuevo estudio.

La etapa más temprana de la formación planetaria comenzó con bloques de construcción conocidos como planetesimales, trozos de roca que varían en tamaño desde asteroides hasta planetas enanos. Investigaciones anteriores sugirieron que los planetesimales podrían haber comenzado como grupos de polvo muy porosos y esponjosos que el calor, la gravedad y los impactos compactados con el tiempo. Pero esta idea sigue sin estar probada, dijo a Space.com el autor principal del estudio, Naoya Sakatani, científico planetario de la Universidad Rikkyo en Japón.