Fuertes explosiones se sintieron este viernes (05.05.2023) en Sudán, en una nueva jornada de enfrentamientos entre el Ejército y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), tras reanudarse los enfrentamientos cerca del Palacio Presidencial en la capital, Jartum. Es el segundo día de la tregua de una semana que ninguna de las partes ha respetado.
Los vecinos aseguraron que el ruido de los bombardeos y disparos de armamento pesado no cesa, mientras los aviones de combate sobrevuelan la zona norte de Jartum, donde está posicionada la FAR y se libra desde este jueves una feroz batalla. Las amenazas de sanciones por parte de Estados Unidos tampoco parecen preocupar a los generales que se enfrentan en una dura lucha por el poder.
El jueves, el presidente estadounidense, Joe Biden, llamó a que «la tragedia debe terminar» y advirtió que podría imponer sanciones a «individuos que amenacen la paz», sin nombrar a nadie. Los hombres al mando de Abdel Fatah al Burhan, en el ejército, y el general Mohamed Hamdan Daglo, en las FAR, llevan más de tres semanas combatiendo, que según la ONG ACLED han dejado al menos 700 muertos.
drama humanitario
Las cifras del Ministerio de Sanidad sudanés, por su parte, hablan de 550 civiles muertos y 5.000 heridos, en un recuento que todos los especialistas consideran poco representativo de la realidad. La ONU, por su parte, estima 335.000 personas desplazadas, incluidas 115.000 que tuvieron que salir de Sudán. La entidad solicitó 444 millones de dólares para ayudar al país, uno de los más pobres del mundo.
James Elder, portavoz de la agencia de la ONU para la infancia Unicef, dijo que 190 niños murieron y 1.700 resultaron heridos entre el 15 y el 26 de abril, según datos proporcionados por establecimientos de salud de Jartum y Darfur (oeste), aunque precisó que Naciones Unidas había aún no ha podido verificarlos de forma independiente.
DZC (EFE, AFP)
Read More: Ni las amenazas ni la tregua detienen los intensos combates en Sudán | El mundo |