1. Un sacerdote culto, conocedor de las ideas políticas contemporáneas, me hizo la siguiente pregunta: «¿Qué quiere decir Benito Juárez?» Respondí: «Benito Juarez significa muchas cosas, pero sobre todo es el hacedor de la patria”.
2. Por supuesto, Juárez fue artífice de la vida nacional; Debemos entender que fue una persona forjada en el pueblo, de origen indígena, con una alta preparación, un espíritu de trabajo verdaderamente notable y un sentido ideológico y nacionalista.
3. Llaman nuestra atención los fenómenos de la vida de Juárez, uno de ellos, el mencionado en la novela «La Estación del Pantano» del autor Yuri Herrera, en la que relata cuando Benito Juárez fue expulsado a Europa por Ignacio López de Santana, de paso por La Habana, llegó a Nueva Orleans. Por aquel entonces en 1849, recordemos que la ciudad de Nueva Orleans, tal como nos la cuenta Ana García Bergua en la novela «La verdadera historia», estaba rodeada de elementos pantanosos, una ciudad fangosa; sin duda, una experiencia formidable para los mexicanos liberales que estuvieron en esa ciudad. Como señala nuestro autor, en aquella época Nueva Orleans implicaba un punto donde había traficantes de esclavos, esclavos fugitivos, gente de todas las razas, músicos, comerciantes, gente libre sujeta a complicadas regulaciones, policías, burócratas y hasta cocodrilos.
4. El cuñado de Benito Juárez, Pepe Maza, Melchor Ocampo, José María Mata y Federico Arriaga buscaban trabajo para sobrevivir en el exilio. Allí se nos cuenta un aspecto verdaderamente impactante, pues se trata de un extranjero de un color irreconocible, quien fue interrogado de la siguiente manera por un policía de la ciudad:
5. Se le preguntó: -Pero tú no eres… Pero estás vestido así… ¿Qué eres? Se volvió hacia los demás. ¿Qué es?
6. «Mexicano», dijo Arriaga, en inglés.
7. El policía levantó las cejas como si dijera la verdad. «Ja», dijo. Dio media vuelta y siguió caminando por la plaza.
8. Esta historia es impresionante, porque denota claramente la discriminación que existía en ese momento y también nos muestra cómo tuvo que luchar Don Benito Juárez en su tiempo.
9. Pablo Benito Juárez García regresó al país y fue gobernador, para luego integrarse al gabinete del presidente Comonfort y posteriormente erigirse como presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para finalmente ser Presidente de la República, quien encabezó una gran batalla contra los extranjeros y contra los conservadores.
10. Para muchos tuvo que luchar así, porque no tenía nada que perder, pero sea como fuere, es un hombre que significó la nación, desde sus orígenes reales, es un hacedor de la patria.
11. Tanto es así, que más allá de la simbología, más allá del gran héroe mítico de una nación, Juárez encarna la nacionalidad mexicana.
12. En todo el país, no hay hombre que destaque más, precisamente en calles, avenidas, plazas, parques, aeropuertos, etc., que el presidente Benito Juárez.
13. Actualmente, me gusta pensar que, después de todo esto, si estuviera hoy aquí, el presidente Benito Juárez nos pediría a los mexicanos, sin duda, una honestidad inmaculada, pero también aludiría a la unión con la patria.
14. En alguna ocasión se le preguntó al presidente Juárez sobre la posibilidad de integrar a su gabinete personal extranjero, para que hicieran grandes labores a favor de la nación, en lugar de una serie de personajes ilustres que tenían una tendencia conservadora. Nuestro docente universitario, Alfonso “El Chato” Noriega, nos recuerda que Juárez, al contestar esa afirmación, no dudó, ni un momento, y señaló que de ninguna manera eran extranjeros; “Es preferible integrar conservadores, porque también son mexicanos”
15. Hoy, por supuesto, son tiempos diferentes, pero el llamado a la unidad no es necesariamente que todas las ideologías estén integradas en el poder público, sino que aún en la batalla, en la confrontación, tenemos que aprender a escuchar y también a integrar los diferentes grupos de diferentes ideologías, porque todos somos una nación, que merecemos ser reconocidos, respetados y escuchados, comenzando por los más vulnerables y marginados y también por los demás.
16. Por tanto, el presidente Benito Juárez es el hacedor de la patria que nos dejó no sólo un legado de unidad nacional, debemos encontrar la manera de resolver las circunstancias que nos separan para poder avanzar juntos como nación. Por eso, me gusta pensar que cada calle, avenida, plaza, mercado, escuela, barrio, municipio, aeropuerto y como se le llame, se convierta en un recordatorio de que todos somos un solo México y que solo unidos podemos serlo. una nación mejor.
POR ENRIQUE QUIROZ ACOSTA
ABOGADO Y COLABORADOR
MAÍZ