El presidente Andrés Manuel López Obrador ha hablado mucho sobre la necesidad y la intención de desarrollar la región sureste del país —de ahí la construcción del tren maya—; y es que, ciertamente, esa zona de México carece de más infraestructura, empleos y producción industrial.
Es interesante que esta región tiene una ubicación privilegiada, así como vastos recursos naturales que podrían ser utilizados para detonar económicamente.
En ese contexto, el hidrógeno verde podría ser el “factor activador” para el desarrollo de esa zona, de la mano del Corredor Interoceánico y el Tren Maya. Actualmente, la región sur-sureste ya cuenta con generación eólica, pero tiene aún más potencial para la generación renovable.
Así, se podría producir hidrógeno verde con energías renovables de la región, y se podría utilizar como vector energético en la industria que se encuentra en esa zona, alrededor del Corredor Interoceánico.
También podría exportarse a Europa, Asia, América del Sur y otras partes, como Australia.
De igual manera, se podría utilizar hidrógeno verde en el Tren Maya, en sustitución o complemento del diesel bajo en azufre.
Según la hoja Ruta para Desarrollar la Industria del Hidrógeno Verde en Méxicoelaborado recientemente por la Asociación Mexicana de Hidrógeno y Sustentabilidad (AMH2), con PwC, se estima un impacto de inversión de 60 mil millones de dólares y la creación de tres millones de empleos en un horizonte de 20 años.
Pero tenemos que empezar ahora. En Chile, por ejemplo, ya se está construyendo una planta para producir hidrógeno verde y exportarlo a Alemania; incluso en este país ya se está suministrando a viviendas residenciales, mezclado con gas natural.
Según diversos estudios de organismos internacionales, México podría ser uno de los principales productores de hidrógeno verde a nivel mundial, con costos súper competitivos.
Además del desarrollo económico, está el aporte que haría el país contra el cambio climático al producir energía y consumirla por parte de la industria en sus procesos de descarbonización industrial, según sus planes cero emisiones o NetZero. Además, el país podría avanzar en sus metas presentadas en el COP27en Egipto.
En conclusión, conviene impulsar la industria del hidrógeno verde en México, y hacerlo ya, porque como he dicho en este mismo espacio editorial, el futuro ya nos alcanzó.
POR ISRAEL HURTADO
PRESIDENTE DE LA ASOCIACIÓN MEXICANA DEL HIDRÓGENO
@ISRAELHURTADOA Y @MEXICOHIDROGENO
MBL