A lo largo de su historia, el marketing ha evolucionado tomando como punto clave diferentes factores según el aspecto del que estemos hablando, con cuatro focos principales: producto, consumidor, marca y era online. Recientemente, una nueva corriente ha empezado a sonar con fuerza, sobre todo tras la pandemia, y no es otra que la marketing centrado en el ser humano.
Más de una agencia de marketing es consciente de la revolución e importancia que esto supondrá a la hora de desarrollar estrategias de éxito. Y tú, ¿quieres saber más?
¿Qué es el marketing centrado en el ser humano?
Este nuevo enfoque busca conectar con la gente, superando el nivel de «consumidor» y entrando en la faceta más personal. De esta forma, el marketing human centric responde al conocimiento de la profundidad que representan los nuevos consumidores, ya que creen en marcas con propósito y que pueden aportar algo bueno a la sociedad.
El público objetivo ya no se considera un mero receptor pasivo a la espera de que sus necesidades sean satisfechas en un receptor complejo, que anuncia sus opiniones, ideas y deseos, y a quién deben escuchar las marcas. Escuchar, prestar atención, son las claves para conseguir el fin último, que sigue siendo vender, pero que ahora también comparte protagonismo con tejer y estrechar vínculos.
Además, el marketing centrado en el ser humano busca transmitir una empatía sincera, que se proyecta más allá de nuestros potenciales clientes, llegando a todas las personas que de una forma u otra tienen contacto con la marca. Se incluyen proveedores, socios, accionistas, transportistas, etc. Todas estas personas tienen un impacto en nuestra empresa, y nuestra empresa en ellos, por lo que al aplicar este tipo de marketing estamos ayudando generar lazos y estrechar lazos con todas las partes involucradas en nuestro ecosistema de marca.
No caigas en la trampa, no es marketing relacional, es marketing centrado en el ser humano
Este concepto puede recordarnos en parte el marketing relacional, pero ambos tienen similitudes y diferencias. El marketing relacional busca crear relaciones de confianza a lo largo del tiempo con los consumidores, poniéndolos en primer plano. Sin embargo, se enfoca más en crear una comunidad que en las ventas en particular.
Por su parte, el marketing centrado en el ser humano, además de dar mayor protagonismo al consumidor, amplía su visión del mismo, viendo a las personas, no solo a los clientes. Ya que son las emociones, los principios y las opiniones las que mueven a las personas, también en sus decisiones de compra, por lo que será fundamental entenderlas y conectar con este lado más íntimo.
Los valores como clave y primer paso de cualquier estrategia
Y, es que, el bueno de Kotler, uno de los grandes referentes del marketing a nivel mundial, ya lo decía: «los marcas más atractivas serán los que demuestren una fuerte personalidad y éticaasumiendo una perspectiva centrada en su lado más humano«. Por tanto, la clave para que nuestras estrategias basadas en human-centric marketing se desarrollen con éxito será basado en valores y principios éticos.
Pero no se trata de empezar a difundir mensajes oportunistas o a base de clichés, hay que evitar sonar a la típica miss o mister universo diciendo que quieren la paz en el mundo. Hay que ser capaz de entender a la gente, y para eso, como decíamos antes, es vital escuchar con interés. Solo si hacemos esto podremos explotar todo el potencial del marketing centrado en el ser humano, logrando beneficios como: mejorar la imagen de marca, aumentar la satisfacción del cliente, identificar nuevas oportunidades, promover valores en la propia empresa u obtener mejores resultados económicos.
Asimismo, vamos a profundizar un poco más en las claves para diseñar una estrategia de marketing human-centric.
Encuentra soluciones y conviértelas en oportunidades
Una vez realizado el ejercicio de prestar atención a las opiniones de las personas, entendiendo su contexto, lo que sienten e identificando sus necesidades, problemas e intereses (en general, todos sus puntos de dolor), así como su origen, debemos centrarnos en la solución. . Podemos poner todo esto por gente compradorauna herramienta que nos ayudará a organizar toda esta información de forma clara para luego transmitir que entendemos los puntos débiles de las personas y somos capaces de ofrecerles soluciones.
Es decir, averigua qué es lo que no obtienen de tu marca y qué es lo que necesitan. Y, tras ello, crear nuevos productos o servicios que cubran un nicho sin explotar utilizando la experiencia del cliente como factor diferenciador.
Para ello es fundamental analizar y reflexionar sobre cómo llegar a los clientes. La comunicación entre pares será la respuesta, nos estamos dirigiendo a una persona por lo que debemos ser lo más humanos posible. Además, comunicar en términos de persona y no de producto también será de gran utilidad. Dejar de lado lo grande que es nuestro producto, para hablar de qué necesidades cubre y cómo aporta a nivel personal.
Diseñar estrategias que conecten con las personas
Comenzar nuestra estrategia basada en lo que hemos aprendido del marketing centrado en humanos será el siguiente paso. Tendremos que idear una manera para que nuestra solución se conecte con los consumidores, usando un comunicación clara, emocional y empáticaque corresponde a sus valores y prioridades.
El marketing de marketing centrado en el ser humano se puede aplicar a todos los procesos y etapas del marketingcomo la investigación, la innovación, la estrategia, la relación con el cliente, la innovación, el diseño de producto, la comunicación, la venta, etc. Esta versatilidad hace posibles múltiples estrategias y acciones, pero no debemos perder de vista la necesidad o problema que queremos cubrir con nuestra oportunidad.
Esta misma mentalidad la podemos aplicar a la hora de diseñar otra serie de estrategias o innovaciones para nuestra marca, especialmente las relacionadas con la tecnología. Como entender que el progreso tecnológico debe ir de la mano con la consideración por las personas y su experiencia, se requiere si queremos mantener lazos con nuestros clientes. Por ejemplo, si diseñamos un programa de respuesta automática para responder a las preguntas de los clientes, también debemos diseñar una opción de soporte personalizado, para que nuestros clientes puedan ser atendidos por un equipo real. Ya que, si nos quedáramos solo con la primera opción, acabaríamos dando una imagen fría y distante, provocando que nuestros clientes no se sientan valorados y acaben abandonándonos en pos de una empresa que sí les transmita ese sentimiento.
Medir lo objetivo y lo subjetivo
Sí, puede parecer un poco complicado, pero no lo es. Como en otras estrategias de marketing, debemos analizar los resultados relacionados con aspectos claramente objetivo y cuantitativo como el número de ventas, engagement, visualizaciones, etc. Pero, en este caso, también habrá que prestar atención a subjetiva y cualitativa como los niveles de satisfacción de nuestros consumidores o sus opiniones. De esta forma, seguimos escuchando a las personas para mejorar su experiencia.
En resumen, una estrategia centrada en el ser humano debe encontrar el equilibrio entre los objetivos humanos y empresarialesya que una adecuada sinergia les ayudará a fortalecerse mutuamente.
Imagen: Depositphotos
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