
Uno de los momentos más tensos del debate se produjo cuando Sergio Massa preguntó a Javier Milei sobre sus duras críticas al Papa Francisco. a quien el libertario había descrito como «el maligno».
Luego de cuestionar al candidato de Unión por la Patria, el libertario dijo que ya se disculpó por sus dichos y que «lo haría de nuevo«.
«Si me equivoco, no tengo ningún problema en decir que lo siento. Dije que si el Papa quisiera venir (a Argentina) sería respetado como jefe de Estado y líder de la Iglesia católica», respondió Milei. después de la solicitud. Massa pedirá perdón a los fieles por sus «ofensas» al Papa.
En su respuesta, Milei destacó que las críticas las había hecho antes de ser candidato; Se paseó y no pidió disculpas en el Foro de Santiago del Estero donde se realizó el primer debate presidencial.
Por eso, Massa vio la oportunidad y empezó a hablar fuera del micrófono. Ella sólo repitió una palabra: «Hazlo, hazlo, hazlo…». Massa quería que pidiera perdón al Papa al aire. Ante la insistencia, Milei se puso nerviosa; Terminó de responder en sus 45 segundos y comenzó a señalar a los conductores que no seguían las reglas.
Milei terminó enojándose. Su reclamo estuvo dirigido a Esteban Mirol y Lucila Trujillo, la segunda pareja de conductores. Pidió que se respete el reglamento, es decir, que Massa no hable mientras le habla.
Tal fue la tensión que la conductora, Lucila Trujillo, tuvo que aclarar que todo lo que se dijo con el micrófono apagado no salió al aire. «El micrófono está apagado pero puedes escucharlo igual aquí.«Se quejó a los conductores, quienes señalaron que Massa no podía ser escuchado en la transmisión en vivo.
En ese momento, todos empezaron a hablar por el micrófono, se lanzaron acusaciones entre ellos y Milei le mostró un bolígrafo a Myriam Bregman quien lo intimidaba desde el otro lado del escenario.
El público también vivió el momento de desorden, comenzaron los murmullos. Fue uno de los pocos momentos alejados de una regulación estricta, lo que inquietó a los candidatos. En especial a Javier Milei que se quedó trabado y un poco nervioso en las siguientes respuestas.
“Lo sacó de la caja”, comentaron los efectivos de Massa al finalizar el debate, donde incluso señalaron que no hubo tantas menciones al caso de Martín Insaurralde.
Para el segundo bloque, Milei regresó con chicanes, exhibición de caras ante las disertaciones de sus rivales y hasta alguna morisqueta. De alguna manera revirtió la imagen estancada de los primeros momentos y hasta el furcio: «Es imposible crecer sin inflación», de lo que se escapó cuando en el primer bloque le apuraron para cerrar la idea de su economía.
Saludo muy frío entre Massa y Milei al final del debate
Al cierre del debate el público aplaudió y los candidatos aplaudieron, a excepción del liberal Javier Milei que no sólo no aplaudió sino que levantó el puño mientras el resto aplaudía.
La salida del escenario fue por el lado derecho, la más cercana fue Myriam Bregman, quien salió sin saludar a sus rivales.
Milei, quien durante el debate se mostró muy respetuosa con el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, le tendió la mano y lo saludó.
Milei, que estaba en el último atril, comenzó a caminar hacia la salida, intentó saludar a Bullrich y ambos enredaron sus micrófonos hasta saludarse frente a los atriles. Milei vio que Massa venía a saludarlo, extendió la mano pero desvió la mirada a paso acelerado y fue un saludo muy frío que provocó que todos los invitados murmuraran.