Si bien entusiasma a muchas personas, también hay que considerar que este anuncio de Facebook tiene algunas irregularidades o pocas certezas. Veamos qué ocurre.
El futuro del Metaverse
El anuncio del CEO de Facebook (ahora conocido como Meta), Mark Zuckerberg, generó muchas expectativas en las personas. Principalmente, porque se trata del “siguiente paso” que llevamos esperando desde que Internet empezó a formar parte de nuestros días, no solamente para divertirnos, sino también para trabajar o estudiar.
Ya sabemos que somos capaces de realizar casi cualquier acción a través de Internet, como ocurre con las apuestas en los mejores casinos online Mexico. Sin embargo, hasta el momento nunca habíamos tenido la sensación de estar verdaderamente allí, por más calidad que tuviese un vídeo o un videojuego.
Es decir, lo que nos falta es experimentar en carne propia todas aquellas sensaciones creadas en un determinado entorno de videojuegos. Y ahí es donde el proyecto Metaverse tiene un gran potencial, ya que significa lo que muchas personas llevan esperando como el “futuro” de esta red.
Ahora bien, se nos ha prometido poder trasladar todas las actividades del mundo real hacia la digitalización, algo que a principios suena como conveniente e incluso de ciencia ficción. Sin embargo, ¿también hay peligros? Incluso, podría decirse que algunas cosas no tienen demasiado sustento o explicación.
El problema de este nuevo sistema
Un tema que hay que considerar es el apartado legal. El hecho de que las personas puedan tener avatares virtuales, donde puedan visitar distintas partes del mundo e incluso interactuar con los otros, genera que esas interacciones no estén reguladas. Es decir, uno puede hacer lo que quiera sin demasiadas limitaciones.
Esto no es lo mismo que en un videojuego donde, si bien hay reglas, jamás sufrirás una “mala experiencia” que te repercuta a nivel sensorial, por ejemplo. Por ejemplo, si disfrutas de un videojuego en el que matan a tu personaje, probablemente tú te enojarás, pero no tendrás esa sensación de dolor.
En el Metaverse todavía esto no está demasiado claro, ya que no se sabe hasta qué punto la tecnología será capaz de materializar estas sensaciones hacia el cuerpo humano. En caso de que se lo pueda lograr, habría que preguntarnos cuál será la legislación de lo que se podrá hacer y lo que no, ya que así como hay buenas personas, también puede haberlas malas.
Lo mismo ocurrirá con la posibilidad de generar dinero. Se sobreentiende que Facebook buscará estos mundos virtuales para que las personas produzcan virtualmente y aprovechen todas las características de estos mundos online. No obstante, ¿hasta qué punto habrá regulaciones sobre las relaciones laborales?
Incluso, cabría preguntarse cómo funcionarán, ya que las personas tienen que trabajar en la vida real para subsistir y también deberían trabajar para ingresar al Metaverse y tener acceso a muchos servicios que se ofrecen en este mundo. Por lo tanto, no se debería permitir una paga irrisoria hacia las personas u horas de trabajo extensas.
Por lo pronto, son todas preguntas que no tienen respuesta, pero que nos hacen reflexionar sobre el futuro de una tecnología que podría cambiarlo todo.