Si la Ciudad de México es considerada la cuna del sonidero, en esta megalópolis también hay una zona en particular que se destaca por ser el punto central donde convergen las agrupaciones más famosas y exitosas de este género local, que animan bailes, eventos sociales y fiestas patronales, celebraciones que reúnen a cientos, a veces miles de personas, y las integran en una comunidad. Se trata de San Juan de Aragón.
Este antiguo pueblo con más de cinco siglos de existencia es considerado uno de los 143 pueblos nativos reconocidos que existen en la CDMX, sin embargo, ahora ha sido absorbida por la gigantesca mancha urbana que aglomera a 25 millones de personas que tienen su casa en el Valle de México.
El pueblo fue fundado a orillas de lo que fue el lago de Texcoco y actualmente es considerado uno de los asentamientos originales de la alcaldía Gustavo A. Madero. A pesar de San Juan de Aragón es uno de los más afectados por las transformaciones que se han producido en su paisajesus calles aún conservan un aire provinciano que se percibe en cada uno de sus cuatro barrios: San Juan Bautista, San Miguel Arcángel, Santiago Apóstol y La Ascensión.
Esta estructura demográfica se complementa con dos sectores: el Sector 32 de La Candelaria, mejor conocido como “La Polanco”, y el Sector 33 de San Felipe de Jesús, conocido por los habitantes del pueblo como “El Piojo”. Dónde Además de una historia común, a los habitantes les une la cohesión a la hora de organizar sus fiestas patronales y celebraciones tradicionales, fechas donde la comunidad fortalece sus lazos comunitarios y vecinales.
Las fiestas patronales, un nexo que une a los barrios
El vínculo entre todos los habitantes se refuerza con su participación en las fiestas patronales, ya que aunque ya no existen mayordomías, los habitantes siguen agrupándose en ‘mesas’, término asignado a las organizaciones encargadas de recoger lo necesario para la celebración de las fiestas de cada barrio. Cabe señalar que en total hay siete fiestas, una por cada barrio y/o anexo, siendo una de las más importantes la del «Patrón» del pueblo, San Juan Crisóstomo.
Según César, uno de los habitantes de San Juan de Aragón y organizador de este tipo de conmemoraciones sociales con tintes religiosos, el eslabón que integra y une a todos los barrios, y los dos sectores, que componen este casco antiguo es la participación en las fiestas patronales. Y cabe señalar que el protagonista de estas celebraciones, además del Santo que se celebra, son las agrupaciones sonideras.
“Hay una organización detrás de todo esto, no todos pueden cerrar la calle”, dijo César en referencia al cierre de espacios donde se instala todo el equipo que conforma el escenario donde actuarán los sonideros, tradición que comparte San Juan de Aragón con Peñón de los Baños y hasta Tepito. Estos bailes pueden durar hasta 20 horas, todo depende de los propios organizadores. “Desde las doce del día, hasta las dos o tres de la mañana”, dijo el vecino del Barrio de Santiago.
Julio y agosto, desfile sonidero en San Juan de Aragón
Sólo en los meses de verano, como julio y agosto, las calles de San Juan de Aragón albergan casi una docena bailes populares llenos de tradición y arraigo, donde la protagonista es la música. Es el momento en el que cada barrio empieza a celebrar su fiesta local, que llevan meses planificando y recaudando fondos para financiarla.
“Las organizaciones del barrio cubren los gastos de los sonideros, recaudan todo el año para poder realizar el evento. Funciona como una caja de ahorros, en la cual entre 15 y 20 personas cubren los gastos de agua, comida, plantas de luz, lonas«, explicó César, quien forma parte de uno de estos grupos. «Lo hacemos con mucho gusto para toda la gente», enfatizó con orgullo. «Y con esto pretendemos no perder nuestras tradiciones aquí en el barrio».
El de San Juan es solo uno de los numerosos bailes sonideros que organiza César en distintos puntos de la CDMX, pues él también está presente en Tultitlán, Cuautitlán, Tepotzotlán, Martín Carrera, Peñón de los Baños, entre otras zonas de la capital y el Estado de México. “Cuando te gusta lo que haces y en lo que estás trabajando, lo haces con más gusto aún”, comentó con absoluta certeza. Ante la pregunta de qué zonas destacan por tener una mayor tradición sonidera, no duda en decir que “aquí mismo”, en Peñón de los Baños y Martín Carrera.
El youtuber Richard TV, por su parte, asegura que San Juan de Aragón es donde más reina el ambiente sonoro: «En San Juan de Aragón se puede ver un baile en esta calleal lado de otro baile con todo el equipo de audio, así que aquí es donde creo que está la zona más sonora».
«Los sonideros son pasión, emoción, sentimiento»
La influencer consideró que un buen baile sonidero debe estar conformado por los cuatro elementos básicos: el sonidero, el bailador, el grupo que pone la música y los publicistas que transmiten estos bailes. En una entrevista aseguró que para él este género tiene un significado muy especial, ya que transmite «pasion, emocion, sentimiento, es todo para mi».
Cuestionada por la influencer Yulay destacó que en San Juan de Aragón “Por lo general todos los años se realizan los bailes, apartan sus fechas y la organización cada barrio trae sus propios sonidos. Esto se suele hacer todos los años en diferentes lugares”, explicó.
Richard enfatizó que, contrariamente a lo que muchos imaginan, un grupo sonoro no solo se dedica a mezclar música exclusiva de este género, ya que también los hay que se especializan en otro tipo de música: “No es solo cumbia y salsa, hay quien toca Rock and Roll, disco, electronica y hay otros que tocan música de banda”, comentó.
Los bailes dinamizan la economía de la zona
Richard también reconoció que estas celebraciones acaban convirtiéndose en un motor que impulsa la economía de la zona: “Hay un gran negocio (detrás de los bailes sonideros) ya que la gente que viene a vender dulces se alimenta de aquí, los que hacen la propaganda, el artista que compone la música, el cuerpo técnico, todos esos muchachos que los acompañan,» él explicó.
El youtuber también destacó que entre la diversidad de grupos sonoros también se encuentran aquellos que gozan de mayor fama o popularidad, como «Ghost Sound» y la «Polimarch Discomáquina». Por su parte, César aseguró que la organización de estas fiestas y bailes requiere de mucho dinero, por lo que se aprovecha cualquier oportunidad que tienen para recaudar fondos:
«Es un ingreso para toda la banda, todos tenemos que generar. Aquí todas las puertas están abiertas (para los vendedores). También rescatamos algo de la platea de las chelas para pagar el audio, para pagar la lona. Todo es un gasto, todo aquí se maneja con dinero porque todo es para gastos”.
Y este movimiento de capital sigue y seguirá impulsando la vida y actividades de los habitantes de Aragón, mientras su historia seguirá nutriéndose de esta mezcla de tradición y modernidadcuyo resultado configura la identidad de un pueblo tan antiguo como los aztecas o los tlatelolcas.
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