
Grupos políticos y cívicos en Perú iniciaron una campaña de recolección de firmas para tratar de forzar, a través de un referéndum, elecciones generales anticipadas que se realizarán ante la falta de definiciones concretas por parte del Ejecutivo y el Congreso para poner fin a la crisis política.
La campaña, que comenzó esta semana con la solicitud de formularios oficiales para recoger firmases «un primer proceso político para unificar el sentimiento mayoritario de la ciudadanía», dijo a Télam Jarek Tello, representante legal del Partido Morado (PM), fuerza centrista que lidera la iniciativa junto a al menos 36 organizaciones de ámbito departamental. .
Aunque las encuestas muestran que Más del 90% de la ciudadanía llama a elecciones generales anticipadas y que unas 60 personas han muerto desde diciembre en movilizaciones exigiendo esta reivindicación, el gobierno de Dina Boluarte, y en especial el Congreso, fuertemente desprestigiado, retrasó seguir adelante con el asunto.
Así, en sectores ciudadanos se instala la idea de que el presidente y los congresistas pretenden quedarse hasta 2026, cuando finaliza el período original que el destituido Pedro Castillo no pudo concluir, a pesar de que analistas como Paulo Vilca lo ven prácticamente imposible. ellos para lograrlo.
recoger firmas
Tello, cuya principal figura es el expresidente interino Francisco Sagasti, indicó que la primera tarea será reunir las poco más de 75.000 firmas (0,3% del padrón electoral) que se necesitan para proponer un referéndum que, en todo caso, necesitaría la aprobación de al menos 66 de los 130 congresistas.
Ese número, según el abogado del PM, se puede lograr con la presión de los movimientos departamentales sobre sus actuales legisladores.
La fuerza política tomó la iniciativa después de que sus principales dirigentes, tras una reunión privada con Boluarte, se quedaran con la sensación de que La presidenta, pese a sus declaraciones, no se percibe como una gobernante de transición Debería salir temprano.
“Esta respuesta refleja su falta de voluntad (de Boluarte) para abordar la crisis y su evidente interés en permanecer en el poder, a pesar de fuertes cuestionamientos sobre su legitimidad en el cargo y las lamentables muertes ocurridas durante las protestas que exigen con urgencia el adelanto de las elecciones generales, dijo el Partido Morado en un comunicado firmado también por los grupos regionales, varios de ellos con fuerte influencia en sus jurisdicciones.
“Del mismo modo, se ha evidenciado que la mayoría del Congreso no tiene voluntad de convocar a elecciones generales para este 2023, ni para los siguientes años. Su desconexión con la realidad nacional es una clara muestra de la superposición de sus intereses personales frente a el interés real de la población», añadió.
Si bien el Congreso aprobó inicialmente elecciones anticipadas para abril de 2024, todo volvió al limbo cuando los propios legisladores, ante la insistencia de Boluarte, dejaron atrás ese acuerdo para debatir la idea de que, por urgencia, las elecciones ya debían realizarse en octubre de este año. . .
Pero varios proyectos en este sentido, incluido uno presentado por el Ejecutivo, fueron derrotados con diversos argumentos, por lo que, independientemente de que el tema quede abierto, ningún progreso real.
Tello indicó que el trabajo apunta a crear las condiciones para que el referéndum se realice a mediados de año, aunque admitió que ya es «más realista» pensar que las elecciones se realizarán en 2024 por la forma en que se vencen los plazos. correr.
Además, el dirigente aclaró que las elecciones propuestas deben tener las características de las ordinarias, es decir, que quienes resulten elegidos para el Ejecutivo y el Legislativo sean por cinco años, en lugar de la propuesta que manejan varios congresistas por “complementaria”. elecciones. “, que solo generaría autoridades hasta julio de 2026, fin del actual mandato, que Castillo había iniciado en julio de 2021.
Celebración de elecciones anticipadas requiere una enmienda constitucional temporallo cual ya tiene precedentes en el Perú, cuando en el 2001, luego de la caída del gobierno autoritario de 10 años de Alberto Fujimori, se realizaron elecciones bajo la presidencia interina acordada en el Congreso por Valentín Paniagua.
Una encuesta reciente de la firma Ipsos indicó que el 70% de los ciudadanos quiere que las elecciones se celebren este año, frente a un 22% que las prefiere en 2024, frente a apenas un 7% que pide que las cosas sigan como están hasta 2026.
Caída de popularidad
Mientras tanto, las mismas encuestas indican que la desaprobación popular hacia Boluarte se acerca a niveles récord cercanos al 80%.
La idea de continuar hasta 2026 solo la defienden explícitamente dos partidos de extrema derecha, Renovación Popular y Avanza País. En el resto de bancadas, de derecha e izquierda, se afirma que se quiere adelantar, pero cuando llega el momento de resolverlo con votaciones en el pleno, el asunto queda empantanado.
Otra posibilidad constitucional para adelantar las elecciones es que Boluarte dimita, quien desde el 7 de diciembre reemplaza a Castillo, encarcelado desde entonces. Eso entregaría el jefe de Estado interino al presidente del Congreso, José Williams, quien estaría legalmente obligado a convocar elecciones lo antes posible.
Pero Boluarte, que ha generado una alianza con varias bancadas que a juicio de Vilca es menos fuerte de lo que aparenta, descarta por completo la posibilidad de dimitir argumentando que quienes quieren su salida, en contra de lo que indican las encuestas, son «minoritarios». , sectores radicales y violentos».
La anunciada intención original del presidente de quedarse hasta 2026 desató protestas en todo el país, aunque con mayor intensidad en el siempre postergado sur andino, que no amainaron cuando la mandataria se retractó de esa posición y dijo que está a favor de que haya elecciones en 2023, pero sin efectos reales.
Cuarenta y ocho civiles murieron en acciones de las Fuerzas Armadas; un policía fue incinerado por los manifestantes y otras 11 personas fallecieron por consecuencias colaterales de la protesta. Los heridos se cuentan por centenares, en medio de denuncias de organizaciones nacionales y extranjeras sobre graves violaciones a los derechos humanos.
Las protestas han amainado en los últimos días, pero los analistas creen que es solo un repliegue por el cansancio y que probablemente la acción regrese ya que las causas del descontento ciudadano no han sido superadas.
En ese marco, surgió la iniciativa del PM y sus aliados regionales -entre los que hay varios que ostentan o han ostentado gobiernos departamentales-, que, aclaró Tello, está abierta a todos los sectores sociales, gremiales, gremiales y estudiantiles que quieran sumarse. .
Fuente: Télam
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