MENDOZA.- El histórico tortuga Jorge supera los 100 años de vida y ha sido cuatro décadas encerradas en el acuario de la capital provincial. Sin embargo, el último tramo de su existencia podría tener otro desenlace, más cercano a su hábitat natural, si un habeas corpus presentado por abogados ambientales, quienes Exigen la liberación del queloniano.
La acción judicial se elevó en los últimos días a un tribunal penal colegiado para que los magistrados determinen que el emblemático ejemplar sea trasladado a una reserva natural de la ciudad. Argentina, Uruguay o México, al igual que ha venido sucediendo con otras especies luego del cierre y conversión del zoológico provincial.
En cualquier caso, cabe recordar que hace años hubo otros intentos truncados de «salvar» a Jorge, principalmente por la explicación de especialistas sobre las pocas posibilidades que tiene de sobrevivir fuera de su lugar actual.
Asimismo, la iniciativa avanza, más allá de la edad actual del animal. La presentación estuvo a cargo de los abogados Vanesa Lucero, María Aguilar y el especialista Oscar Mellado, quienes consideran imprescindible que Jorge sea tratado como «un sujeto de derechos esenciales, como la libertad», más allá de entender que es un «animal viejo».
Han pasado más de 20 años desde que se puso sobre la mesa el primer intento de llevarlo al mar, pero la propuesta no tuvo éxito, ya que estudiosos de la zona consideraron que podría encontrar la muerte al intentar buscar comida cerca. un barco de pesca, que yo arrastraría con las redes.
El amado y visitado animal del Acuario de la Ciudad de Mendoza fue encontrado herido en 1984 por un grupo de pescadores en una playa de Bahía Blanca, en Buenos Aires. Con 40 kilos fue trasladado a la provincia de Cuyo, donde ha pasado más de 37 años en el municipio, alcanzando un peso de más de 90 kilos.
Hace 15 años, Jorge fue noticia porque mató a su “compañero de cuarto”, un tiburón nodriza que mordió cuando compartían la pecera. De hecho, en 2006, tras las obras de remodelación del acuario, el Tortugo fue a una pecera especial más grande, donde lo dejaron solo.
Como pudo saber EDL, Las autoridades del acuario creen que la tortuga no sobreviviría en un eventual regreso a las aguas del océano, pero aseguran que no se oponen a su traslado a un santuario natural.
En este sentido, la decisión de la Justicia local basada en un «Estudio técnico-científico» y el posterior proceso de rehabilitación del presunto traslado, pero el mensaje que los abogados ambientales pretenden dejar tiene que ver con el sufrimiento de los animales en cautiverio. De hecho, en la provincia occidental argentina existe una norma que prohíbe “la explotación, exhibición, exhibición o participación de animales, cualquiera que sea su especie”.