La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteDH) emitió este miércoles (28.06.2023) una resolución que ordena a Nicaragua liberar al obispo Rolando Álvarez, condenado a 26 años de prisión por negarse a salir del país rumbo a Estados Unidos.
La Corte Interamericana otorgó medidas provisionales en las que ordena a Nicaragua “proceder de inmediato a la liberación de monseñor Rolando José Álvarez Lagos, obispo de Matagalpa, así como a adoptar las medidas necesarias para proteger efectivamente su vida, salud e integridad personal”.
Los jueces también ordenaron que mientras se realizan los trámites administrativos para la liberación inmediata de Álvarez, el Estado debe “garantizar un trato digno a través del acceso inmediato a servicios de salud, medicamentos y alimentación adecuada, así como facilitar su contacto con familiares y abogados”.
La Corte Interamericana informó que esta resolución, que notificó el miércoles al Estado, se fundamenta en que determinó que Álvarez “se encuentra en una situación grave que le ocasiona daños irreparables a su vida, salud e integridad personal”.
Además, los jueces sostuvieron que esta situación se ve agravada por el hecho de que habría sido condenado a la pérdida perpetua de los derechos de ciudadanía y la pérdida de la nacionalidad nicaragüense, lo que lo coloca en “una situación de extrema vulnerabilidad”.
Esta resolución se suma a otras que la Corte Interamericana emitió durante meses a favor de decenas de personas consideradas presas políticas en Nicaragua, la última en enero de 2023, sin ser acatadas por el gobierno del presidente Daniel Ortega.
Álvarez se negó a salir de Nicaragua
Según información de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, hasta noviembre pasado Nicaragua había enviado 19 comunicaciones en las que expresaba su rechazo a las medidas provisionales “por considerar que siguen un guión impuesto por los Estados Unidos de América” e «incluir una narrativa sesgada».
En febrero de 2023, el gobierno de Ortega liberó y expulsó del país a 222 presos políticos, quienes fueron trasladados a Washington en un avión fletado por el gobierno estadounidense.
El obispo Álvarez se negó a salir del país, por lo que fue condenado a 26 años de prisión, despojado de su ciudadanía y trasladado de su arresto domiciliario a la cárcel.
Además, Ortega ha declarado interrumpidas las relaciones bilaterales con el Vaticano y ha calificado a la Iglesia de «mafia», a la que acusa de antidemocrática por no permitir que los católicos elijan directamente al Papa, a los cardenales, a los obispos y a los sacerdotes.
Nicaragua atraviesa una crisis política y social desde abril de 2018, que se ha agravado tras las polémicas elecciones generales del 7 de noviembre de 2021, en las que Ortega resultó reelecto para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto a su esposa. ,Rosario Murillo. , como vicepresidenta, con sus principales contendientes en prisión o en el exilio.
mg (efe, afp)