El mercado de las telecomunicaciones vuelve a tener movimientos en la parte más barata. Centrarse sólo en ese coste, sin revisar condiciones, puede incrementar la factura final, advierten los expertos, sobre todo si hay que abandonar el contrato.
Al estudiarlas, como ventaja sus tarifas “suelen ser más fáciles de entender que las de la luz o el gas”, comenta Sara Perales, experta en telecomunicaciones de la comparadora Kelisto. Principalmente hay que fijarse en el precio, el servicio, la permanencia y las penalizaciones. Con los continuos cambios del mercado, “siempre que hay una oferta o un regalo suele conllevar una permanencia”, comenta Àlex Canovas, jurista y técnico de la Unió de Consumidors de Catalunya (UCC). Lo habitual es que tengan una duración máxima de 24 meses, periodo que se ve más para ofertas con móviles a plazo.
Al intentar salir del contrato antes de cumplir el plazo, suelen existir penalizaciones o cargos por servicios que se presentaron como gratuitos, generalmente la instalación del router y la conexión. “No hay que creer que el costo de incumplir la permanencia se diluye, siempre hay que preguntarse cuánto hay que pagar si se va. Lo ideal es a través de canales que dejen constancia, con un correo electrónico”, aconseja Cánovas. “Las penalizaciones se pondrán en el contrato, hay que revisarlo”, explica Perales.
Si no se cumple con la permanencia, se podrán cobrar costos que habían sido gratuitos, como la instalación.
Los precios deben mantenerse durante el periodo establecido y si el anuncio incluye un plazo “para siempre”, mantenerlos. “Pase lo que pase… En principio no pueden hacer trampa. Eso sí, intentar venderte más o mejores servicios para subir el precio”, afirma Cánovas. En caso de aumentos de precios -como actualización con el IPC- se deberá notificar con un mes de antelación, como en la factura previa al cambio de tarifa. “Las pequeñas empresas no suelen aplicar subidas tras agotar la permanencia. Si lo hacen, deberían avisarles y quitarles la permanencia con el aumento”, afirma Perales.
Un factor a tener en cuenta es que en algunas ofertas el precio prometido puede subir antes de finalizar la estancia. Por ejemplo, cobran menos durante 6 meses, pero les obligan a quedarse 12, siendo los 6 restantes a un coste mayor. Por eso se llama a revisar el contrato y calcular el costo en términos anuales para comparar. “Ayuda a valorar si realmente te da un precio más bajo”, argumenta Perales.
Un hogar con telefonía fija, móvil y banda ancha, acceso fijo y televisión de pago gasta una media de 95,40 euros, según la CNMC
En un mercado con tanta oferta el precio no termina de definirlo todo, por eso las grandes mantienen el interés de muchos. “Hay usuarios que buscan servicios de televisión más premium, de pago, más conservadores y que no confían tanto en las pequeñas empresas”. Por ejemplo, quienes quieran adquirir paquetes de fútbol tienen que acudir a operadores más reconocidos. De ahí que las grandes empresas jueguen un doble juego: con sus marcas bajo costo Atacan al público que se guía por el precio, mientras que al mismo tiempo tienen en su gama planes más caros. En paquetes con más servicios también hay que estar atento al final de las ofertas. Como Netflix gratis durante X meses. Al final del plazo comienza el pago y suele tomarse por sorpresa: hasta que llega la factura el cliente no se da cuenta.
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A la hora de elegir uno u otro hay que valorar qué se necesita. “Si nos adaptamos a nuestro consumo suele haber ofertas más económicas”, afirma Perales. En el móvil, la clave está en no exagerar, para no pagar más, o quedarse corto, para no tener que comprar bonos de datos. Comenta que 10 gigas ya es más que suficiente. “Hay que tener cuidado con las tarifas de datos ilimitados, es posible que no se aproveche al máximo y puede haber cargos extra por cosas como itinerancia«, el Advierte. O que en determinados niveles se reduce la velocidad. En el caso de internet en casa, la fibra óptica básica de 100-300 megas cubre las necesidades de un hogar normal, con teletrabajo básico. Si hay muchas conexiones, varias teletrabajando o jugando online, se podrían necesitar entre 600 y 1.000 megas, explica.
Paso Lowi
Esta semana Lowi, marca bajo costo de Vodafone, ha anunciado una oferta de 20 euros al mes para servicios móviles y de fibra óptica, rompiendo las tarifas más bajas de Digi, que hasta ahora marca el ritmo en el mercado low cost, comenta Kelisto. Como siempre hay que revisar las condiciones, entre las que destaca la estancia de 12 meses.
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