Esta semana terminó una de las huelgas de actores de Hollywood más largas de la historia. Ha sido duro para ellos, porque la mayoría lleva seis meses sin recibir salario. Y sólo un porcentaje mínimo de actores son millonarios. Pero han conseguido lo que querían. Incluido poner límites al uso de inteligencia artificial para reemplazarlos.
La huelga de actores del sindicato SAG-AFTRA Comenzó el pasado mes de mayo, poco después de la huelga de escritores, que también ha finalizado.
Ambos parones han retrasado multitud de series y películas que tenían previsto estrenarse en 2023, pasando a 2024, e incluso a 2025. Entre ellas, la última temporada de Stranger Things, por ejemplo.
Una gran victoria para los actores… contra la IA
Esta semana, el sindicato SAG-AFTRA llegó a un acuerdo con las empresas cinematográficas. Como ha pasado con los guionistas, al final las productoras lo saben, sin guionistas ni actores no hay series ni películas. Entonces ambos gremios obtuvieron la mayor parte de lo que pidieron.
En el caso de los actores, Van a recibir una subida salarial global de 1.000 millones de dólares en tres años. Además, Cobrarán un porcentaje de las ganancias del streamingdependiendo de las vistas.
Finalmente, han frenado de repente los intentos de las productoras de sustituirlas, de forma gratuita, por inteligencia artificial.
Una de las causas de la huelga fue el anuncio de que Algunos estudios querían escanear en 3D los rostros de los actores para poder reemplazarlos por IA cuando fuera necesario. Por ejemplo, para añadir escenas extra, rejuvenecerlas, etc. Todo sin cobrar por utilizar tu imagen.
El acuerdo impide que los estudios utilicen IA para reemplazar actores sin su consentimiento. Y también deberán pagarles cuando lo utilicen con su imagen.
Que actores y guionistas estén mejor pagados y trabajen más cómodamente es una buena noticia para los espectadores.. Porque funcionarán mejor, y por tanto tendremos mejores películas y series. Pero como ya han advertido algunos estudios, tememos que, al final, acabemos pagando la huelga, en forma de aumento del precio de las suscripciones de streaming.
Con información de Telam, Reuters y AP