Maersk suspendió sus operaciones en la región después de que militantes dispararan contra dos de sus buques.
La filial estadounidense del gigante naviero danés Moller-Maersk ha dicho que seguirá los pasos de su empresa matriz y dejará de enviar buques mercantes a través del Canal de Suez y el Mar Rojo debido a los ataques de los hutíes con base en Yemen.
Los hutíes –un grupo islamista chiita que controla gran parte de Yemen, incluida la capital, Saná– han estado atacando y secuestrando barcos que cruzan la vital vía fluvial en solidaridad con los palestinos en medio de la guerra entre Israel y Hamas. Los militantes dijeron recientemente que ampliarían sus ataques después de que Estados Unidos y el Reino Unido comenzaran a bombardear objetivos vinculados a los hutíes en Yemen a principios de este mes.
Dos buques operados por Maersk Line (MLL), el Maersk Detroit y el Maersk Chesapeake, así como su escolta de la Marina estadounidense, fueron atacados con misiles de crucero hutíes en el estrecho de Bab-el-Mandeb el miércoles, dijo la compañía.
El Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM) anunció más tarde ese día que ningún barco había resultado dañado, mientras que el portavoz hutí, Yahya Saree, afirmó que varios misiles alcanzaron su objetivo y obligaron a los barcos a retroceder.
«El La Marina de los EE.UU. ha dado la vuelta a ambos barcos y los está escoltando de regreso al Golfo de Adén”, dijo un comunicado de Maersk, agregando que «Tras la escalada del riesgo, MLL suspende los tránsitos en la región hasta nuevo aviso».
MLL opera barcos con bandera y tripulación estadounidenses. La filial siguió utilizando la ruta de Suez hasta el miércoles, mientras que su empresa matriz suspendió los viajes por la vía fluvial el 5 de enero.
Según la Casa Blanca, el tráfico a través del Canal de Suez, la ruta más rápida de Asia a Europa, representa alrededor del 15% del transporte marítimo comercial del mundo. Para evitar el riesgo de ataques con misiles hutíes, algunas de las compañías de transporte más grandes del mundo se han visto obligadas a desviar sus buques alrededor de la costa de África, enfrentando mayores costos y primas de seguro disparadas.
La operación de bombardeo liderada por Estados Unidos contra Yemen ha sido denominada ‘Operación Arquero Poseidón’, una iniciativa separada de la ‘Operación Guardián de la Prosperidad’, que se lanzó anteriormente para salvaguardar el transporte marítimo comercial en el Mar Rojo.
Los hutíes han prometido continuar sus ataques contra los barcos que se dirigen a Israel. “hasta que cese la agresión y se levante el asedio al pueblo palestino en la Franja de Gaza”.
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