Detrás de cada palabra y acto que Rusia dice y hace, puede haber una intención oculta. Por ejemplo: el curioso ataque con drones al Kremlin. Algo explotó allí, pero nadie sabe realmente qué, cómo o por qué. Ahora el jefe del ejército privado de Putin, los mercenarios del Grupo Wagner, gritó muy fuerte que el 10 de mayo sale de Bajmut.
Bakhmut es una ciudad ucraniana insignificante, en la que Kiev y Moscú tienen la batalla mas larga de guerra. Su caída o conquista significará para cada bando un gran revés o victoria. Su valor es simbólico, no estratégico.
Supuestamente, el jefe del grupo, Yevgeny Prigozhin, está enojado con el ejército regular ruso por no proporcionarle municiones. Y sin municiones Prigozhin y sus hombres dan la vuelta. Sus mercenarios, muchos de ellos convictos dispuestos a todo, son la punta de lanza en Bajmut. Sin ellos, la ciudad caerá en manos ucranianas.
Prigozhin ha estado protestando por la falta de municiones durante mucho tiempo. Su denuncia no es nueva. El ultimátum del 10 de mayo es nuevo. Fecha, curiosamente, en la que Rusia asegura que Ucrania lanzará la ansiada contraofensiva.
Entonces, ¿la ira de Prigozhin es parte de una conocida lucha interna entre el Estado Mayor General ruso y sus mercenarios, o es la excusa para mover el Grupo Wagner a otras posiciones ¿La clave para detener la contraofensiva de Kiev?
Los hechos
Prigozhin lleva meses acusando al Estado Mayor ruso de no proporcionarle suficiente munición para que los paramilitares de Wagner no obtengas una victoria que empequeñecería al ejército regular en Bakhmut.
En dos videos difundidos el viernes por su servicio de prensa, los ataques de Prigozhin alcanzan un nivel sin precedentes exposición las supuestas altas tensiones existente entre las fuerzas de Moscú.
“Íbamos a tomar la ciudad de Bakhmut antes del 9 de mayo”, el día en que Moscú celebra por todo lo alto su victoria sobre la Alemania nazi en 1945, decía Prigozhin en uno de sus vídeos.
«Cuando vieron eso, los burócratas del ejército detuvieron las entregas» de municionesafirmó.
«Por lo tanto, el 10 de mayo de 2023 tendremos que entregar nuestras posiciones en Bakhmut a las unidades del Ministerio de Defensa y retirar las unidades Wagner a los campamentos de retaguardia”, declaró.
Prigozhin explicó su decisión asegurando que, sin municiones, sus hombres se enfrentan a «una muerte absurda». Argumento extraño, cuando los relatos de los soldados ucranianos describen a los hombres de Wagner, corriendo como zombis hacia el frente, para luchar hasta la muerte. «No paran hasta que caen muertos».
«Es como esa película de la Guerra Mundial Z. Los zombis hacen la guerra. Es exactamente lo mismo. Caminan sobre los cadáveres de sus camaradas. Es muy… interesante. Para mí, toman drogas. No es alcohol, es diferente. ¿Por qué no? Se sienten asustados. No les importa si los matan. Solo se derrumban cuando no pueden caminar”, explica Andrii, un soldado ucraniano, sobre los combatientes del grupo paramilitar.
Los vídeos de Prigozhina
No estaba claro si los comentarios de Prigozhin fueron una decisión firme o un ultimátum, ya que el jefe de Wagner suele hacer tales declaraciones. antes de dar la vuelta.
Los analistas estiman que sus ataques públicos contra los militares tienen como objetivo presionar al presidente ruso, Vladimir Putin, para que intervenga en su nombre.
Preguntado al respecto, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo que había «visto estas declaraciones en los medios», pero rechazó hacer comentarios.
En un segundo video, Prigozhin atacó directamente al ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, y al jefe del Estado Mayor, Valery Gerasimov.
Caminando de noche entre decenas de cadáveres presentados como los de miembros de Wagner recién muertos en combate, dijo: «Estos tipos son de Wagner. ellos murieron hoysu sangre aún está caliente (…) ¡Murieron para engordar en sus oficinas!».
«Usted se sienta en sus clubes caros y sus hijos disfrutan de la vida, ¡haga videos en YouTube!» Prigozhin agregó, desatando una andanada de insultos.
«¡Shoigu! ¡Gerasimov! ¿Dónde está?» mi puta munición?», gritó enojado.
Wagner ha sufrido grandes pérdidas en los últimos meses al intentar tomar Bakhmut.
El grupo paramilitar ha conquistado gran parte de la ciudad, pero no ha podido tomar el resto de posiciones ucranianas.
Aunque el Kremlin niega cualquier tensión dentro de las fuerzas rusas, las últimas declaraciones de Prigozhin apuntan a lo contrario. ¿O es simulación? Con Rusia, nunca se sabe.
Escrito de Clarín con información de AFP
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