El juez federal Ernesto Kreplak avanza en la investigación que tiene a Martín Insaurralde en el ojo de la tormenta. Las medidas impulsadas buscan esclarecer Cómo se financió el viaje a Marbellaquién cubrió los gastos de la escapada, y de dónde procedía el lujoso yate «Bandido».
Se concentra el expediente en el que interviene el fiscal Sergio Mola tres denuncias presentadas en el juzgado federal de Lomas de Zamora, más uno que había sido presentado en La Plata. Los delitos que se le atribuyen al exjefe de Gabinete son los de enriquecimiento ilícito y lavado de dinero. Esta última acusación también se extendió a su exesposa Jésica Cirio y a la joven Sofía Clérici.
Luego de acumular las denuncias que se abrieron en la justicia federal de la provincia de Buenos Aires, el juez Kreplak ordenó las medidas que había solicitado el fiscal Sergio Mola para activar un protocolo de investigación patrimonial. Fuentes judiciales explicaron a Clarín que el mayor esfuerzo está destinado “a determinar la consistencia de los ingresos y gastos del dinero, la financiación de Estilo de vidatodo lo que determina si el conjunto patrimonial puede explicarse o no”.
El escándalo que empujó a Martín Insaurralde a renunciar al gabinete de Axel Kicillof así como a la candidatura a concejal en el distrito que gobernó durante años, abrió una serie de interrogantes en el marco del expediente. La principal se centra en el viaje a Marbella como el hecho más reciente que desató un aluvión de denuncias en su contra.
El Ministerio Público solicitó que se solicite toda la información que pueda explicar cómo se financió el viaje al Mediterráneo. A partir de la declaración de Cléricci que, buscando separar al ex intendente de Lomas de Zamora, dijo que el yate era préstamo de una amiga de su hermana «que me lo prestó para navegar un día», se solicitan medidas para determinar si es cierto o si se trata simplemente de un recurso para insistir en el despido basándose en la idea de que no existe delito penal.
¿De quién es el yate Bandido?
Justicia federal decidió disipar sospechas en torno al yate: determina quien es su dueño, si efectivamente se trató sólo de una cesión a Insaurralde y Clerici. Y si era un alquiler, ¿quién y cómo lo pagaba?
Esta primera etapa de la causa penal está anclada en la sospecha que le atribuye en su acusación el fiscal federal. Cecilia Incardona: enriquecimiento ilícito.
Esta figura penal está vinculada a la otra acusación que hace referencia al blanqueo de capitales. Toda operación de lavado requiere de un precedente delictivo, es decir, el origen de los presuntos fondos ilícitos que se busca insertar en el mercado formal bajo la apariencia de legalidad.
Para determinar este punto, el tribunal dio lugar a una serie de medidas que había solicitado el fiscal Sergio Mola, que incluyen un análisis exhaustivo del patrimonio de Insaurraldeno sólo contrastando la información proporcionada en sus declaraciones juradas como funcionario público, sino también toda la información recabada con posterioridad a la levantamiento del secreto bancario y fiscal.
La Procuraduría de Delitos Económicos y Lavado de Activos (PROCELAC), encabezada por el fiscal Diego Velasco, se puso a disposición para colaborar en el expediente, algo que Mola también consideró importante a la hora de requerir medidas patrimoniales.
Hasta el momento, la justicia tiene bajo análisis cerca de 200 viajes realizados por el exalcalde al extranjero, así como el uso de vuelos privados en algunas ocasiones.
El escándalo de Insaurralde y el viaje a Marbella en plena campaña electoral aparecieron en el último debate de los candidatos a la presidencia de la Nación. Urgido por Patricia Bullrich, Sergio Massa dijo que le pidió renunciar tanto al gabinete de Axel Kicillof como a la candidatura a concejal por Lomas de Zamora.