Comienza la batalla entre BBVA y Sabadell. Pasadas las 22.00 horas de este jueves, Banc Sabadell respondió a la opa hostil lanzada a primera hora de la mañana advirtiendo a la CNMV de una supuesta violación de la ley de opas. Según la entidad nacida en Cataluña, la documentación entregada por BBVA en una conferencia con analistas y los comentarios realizados en la misma, «violan el artículo 32.1 del Real Decreto 1066/2007, de 27 de julio, sobre régimen de las ofertas públicas de adquisición». de valores y, en general, introducir datos incompletos que puedan afectar el mercado”.
En un breve comunicado, Sabadell ha detallado que «ha informado de esta circunstancia a la Comisión Nacional del Mercado de Valores con el fin de que el mercado disponga de una información completa y transparente y se garantice un proceso ordenado y correcto».
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Fuentes financieras explican que algunos de los comentarios que la dirección de BBVA ha trasladado a los analistas no se ajustan a lo que establece la norma española sobre ofertas de compra. En la citada reunión con analistas celebrada por videoconferencia se dieron detalles sobre la opa, el precio, los contactos con determinados accionistas de Sabadell, las comunicaciones con los reguladores o los pasos a seguir a partir de ahora.
La ley de opas en España es muy estricta ya que especifica qué se puede comunicar y qué no una vez iniciado el proceso de compra. Además, al tratarse de una opa hostil que es rechazada por el consejo de administración de Sabadell, es de esperar que las dos partes (especialmente la comprada) analicen detalladamente el cumplimiento de lo que marca la ley.
Sabadell pide a la CNMV que «el mercado disponga de una información completa y transparente y se garantice un proceso ordenado y correcto»
El éxito de la opa depende de que un mínimo del 50,01% de los accionistas de Sabadell acepten la compra de sus acciones por parte de BBVA. Por este motivo, ambas partes miran de cerca todo el proceso.
La opa anunciada esta mañana es exactamente la misma que ya puso sobre la mesa el BBVA y que fue rechazada el lunes por el consejo de administración de Sabadell.