La marea rosaun movimiento de organizaciones sociales que se ha manifestado en defensa de democracia y libertadesha convocado a una nueva movilización nacional en defensa de la república para el próximo domingo 19 de mayo.
La convocatoria va acompañada de una invitación a los candidatos que se identifiquen con la defensa de la república, la democracia y las libertades, a emprender juntos la Batalla electoral del 2 de junio. La invitación a los candidatos demócratas ha generado revuelo y las críticas al movimiento por parte del Gobierno y su partido no se han hecho esperar, argumentando una supuesta maniobra partidista. Nada más falso.
Defender la República es hacer valer los principios y valores democráticos consagrados en la Constitución, es asumir la voluntad de nuestro pueblo -forjada a lo largo de nuestra historia en medio de grandes sacrificios- de “convertirse en una república representativa, democrática y federal”. . Es reconocer y vivir con la conciencia de que la república es una forma de gobierno y una forma de ser de la nación.
Marchar el 19 de mayo en defensa de la república exige respeto a la repartición del poder, hoy vulnerado por el sometimiento de la mayoría artificial de Morena a los designios del poder ejecutivo. Muchos grilletes y violaciones al proceso legislativo y a la constitución en la cámara de diputados y en el senado durante el actual sexenio, el servilismo a la consigna de “no mover una coma” a las iniciativas ordenadas desde la mañana ha hecho mucho daño al país; de la lástima ajena al ver la fila de legisladores de Morenafuera de Palacio Nacionalpara ser recibido por el presidente.
Defender la república es fortalecer la federalismo, hoy asfixiados por el centralismo del gobierno que intenta absorber todos los poderes de los estados y municipios. A esto hay que sumarle la concentración de funciones, especialmente por parte del ejército, que bien podría estar en manos de individuos y agencias civiles. La militarización de la administración pública es, por lejos, una de las señales más claras de la desnaturalización de las instituciones del Estado mexicano.
Unirse para defender la democracia y las libertades es defender el voto libre, informado y secreto. Las próximas elecciones no sólo son las más grandes y complejas, también son las más importantes para el futuro democrático del país, serán un verdadero parteaguas; El sufragio es un derecho y una prerrogativa ciudadana del más profundo significado democrático y político. Por eso resulta aberrante escuchar que para el candidato presidencial del oficialismo es “sólo un trámite”.
Por estas y otras razones, todos los candidatos que demuestren su compromiso con la defensa de las libertades y la democracia son bienvenidos a la marcha en defensa de la república.
Por todo lo que está en juego en estas elecciones, el movimiento de organizaciones sociales no puede ni debe permanecer indiferente ante los acontecimientos, ni limitarse a la neutralidad política en aras de un purismo ciudadano que ponga en peligro el futuro democrático del país. en riesgo y que sería inaceptable e inconsistente con las causas que ha defendido.
POR MARCO ADAME
Analista y Consultor Político
MAAZ
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