La canciller Diana Mondino y el secretario de Finanzas Pablo Quirno aterrizaron en la OCDE en París, tras terminar una de las más difíciles giras de este nuevo gobierno: una visita a China, gobernada por comunistas. Un país que es uno de los socios comerciales más importantes de Argentina, al que llegaron a dar explicaciones de su plan y de cómo operarán comercialmente con la mayor potencia comunista del mundo con sus empresas y no con su estado. Un modelo que sorprendió a los empresarios que llevaron, que se lo explicaron a sus interlocutores chinos.
El swap chino que salvó al gobierno de Alberto Fernández será pagado. Pero Mondino remarca que lleva décadas en marcha y no le pidieron a China los 15.000 millones de dólares para salir del cepo. Acusó a Sergio Massa de haberlo utilizado «en una forma absolutamente fuera de todo lo imaginado para intervenir en el mercado, con un mecanismo de dudosísima transparencia”.
Argentina formará equipos para usar por períodos las bases chinas en la Patagonia porque los contratos lo permiten. Pero la canciller Mondino no sabe si hay militares chinos en las bases. “Los que fueron de investigación no identificaron que hubiera personal militar. Son chinos, son todos iguales”, admitió con candidez.
Mientras esperaban presentar “la hoja de ruta” para que Argentina entrara en la OCDE, la canciller Diana Mondino y el secretario de finanzas Pablo Quirno conversaron con Clarín en París. El viaje a Beijing y Shangai, las relaciones con su gobierno, las bases militares chinas, la salida del cepo, la adhesión a la OCDE, las dudas del GAFI sobre el régimen de incentivos para grandes inversiones de su gobierno para lavado de dinero, el alineamiento de Milei con Israel -cuando el país está profundamente dividido por la guerra y por su primer ministro Benjamin Netanyahu-, la media sanción de la Ley Ómnibus, el pacto del 25 de Mayo y el criterio para pagar las deudas que heredaron fueron parte de esa conversación.
Quirno regresaba a Buenos Aires porque ya estaba el equipo del FMI en el país. Mondino sigue su ruta hacia Bruselas, aprendiendo en estos 120 días en el poder a hacer la valija en diez minutos y a ser su propia peluquera. Además de cumplir con el difícil rol de ser “el bombero voluntario” del presidente Javier Milei ante sus zafarranchos diplomáticos.
China, la poderosa mal querida
-Cuénteme cómo terminó su gira por China. ¿Cuál va a ser finalmente la relación entre ambos después de un comienzo un poco complicado?
-M: La relación ha sido, es y será excelente. ¿Lo del comienzo complicado? No sé de dónde ha salido esa percepción porque de ninguna manera ocurrió. Lo que es cierto es que Argentina había incumplido con prácticamente todos los contratos firmados con empresas chinas antes del nuevo Gobierno y eso genera preocupación. Pero este nuevo Gobierno está tratando de reordenar y reorientar todas esas actividades, más atraer inversiones que podrían ser, por supuesto, de China.
-¿Pero usted debió dar grandes explicaciones después que el presidente Milei dijo: “Son comunistas, no quiero hacer comercio con ellos”?
-M: No. El presidente Milei lo que dijo es que no íbamos a tener relaciones Estado-Estado empresariales. Nosotros no vamos a generarlas. Las que están del pasado continuarán porque ya están firmadas y la República es una sola. Sí, pero con las empresas nunca hay ningún tipo de dificultad.
-¿Cómo van a ser los vínculos entonces? Entre China y Argentina y entre los empresarios chinos y los empresarios…
-M: Esperemos que muy activos, sobre todo entre empresarios, en donde el Estado no tenga que participar.
-Los empresarios estaban un poco inquietos frente a esa fórmula.
-M: Ah, claro, porque quieren la protección y quieren subsidio. ¡Qué vivos! De ambos lados, de ambos lados. Pero no va a ser el caso.
-Quirno: Pero tuvimos una delegación muy importante de empresarios chinos y argentinos participando del encuentro. Hicimos muy buenas reuniones. También a nivel de las empresas privadas. Así que creo que eso va a fomentar el comercio entre los países.
-M: Unas 21 o 23 son las empresas argentinas que nos acompañaron en el viaje. Sí, por supuesto. Ellos hicieron sus rondas de negocios. Tuvimos un seminario de casi 100 empresas chinas participando. Allí fue donde los empresarios argentinos o empresas chinas, que ya están operando en Argentina, les contaban a los empresarios, que todavía no conocen tanto Argentina, cómo era. O sea, donde el Gobierno solamente proveyó la posibilidad del encuentro. Pero no fuimos nosotros los que contábamos, sino los propios actores. Y creo que todo eso le da una transparencia que es muy poco habitual.
¿Un problema ideológico?
-Canciller, ¿pero esto es un problema ideológico, es una nueva metodología o cómo es? Porque finalmente China es uno de nuestros mejores socios.
-M: Claro, lo ha sido y lo será. ¿Pero por qué un problema? El problema ideológico lo podrías considerar desde el punto de vista de que no vamos a usar dinero de los contribuyentes argentinos para un negocio en particular. Repito, lo que está firmado de antes…. habrá que ver cómo logramos cumplirlo o si hay que renegociar algo. Y todo lo nuevo, que no sea con dinero de nuestros impuestos.
-¿Y cuál fue la recepción por parte de los chinos cuando ustedes tuvieron esa propuesta?
-M: Excelente. Ellos son “muy”… Lo que les interesa es hacer la actividad del negocio. ¿Quién y cómo lo hace? Sinceramente creo que les da más tranquilidad saber que la contraparte será del sector privado y tiene posibilidades de cumplir de nuevo. Hay una preocupación por todo lo que ya existía de antes y eso es lo que necesitan entender.
-Eso es por lo que usted tuvo que dar mayores explicaciones.
-Quirno: Explicaciones. Es una cuestión de tener una relación, que es una relación que tienen que conocer al nuevo gobierno. Nosotros fuimos a explicar qué es lo que estábamos haciendo, cómo lo estamos haciendo, que queremos fomentar el comercio entre los países, que queremos fomentar la inversión privada. Porque eso es lo que Argentina necesita para para progresar.
El dilema de swap
-¿Argentina va a pagar el swap que le dieron al gobierno de Fernández? ¿Se lo van a extender? ¿Cómo va a ser?
-M: Yo tengo como periodista la pregunta de por qué ha agarrado la imaginación popular. El swap existe hace más de 20 años. ¿Por qué este año es un tema de gran preocupación?. Es cierto que Massa lo utilizó en una forma absolutamente fuera de todo lo imaginado para intervenir en el mercado, con un mecanismo de dudosísima transparencia. Pero el swap como tal existe hace décadas.
-¿Y cómo lo van a usar ustedes entonces?
-M: ¿Pero por qué tendríamos que usarlo?
-¿O sea, no lo van a usar al swap?
-Quirno: El swap es un intercambio para fomentar el comercio. Entonces es para facilitar el comercio. Entonces, de esa manera, se ha realizado un desembolso en el gobierno de Alberto Fernández. Como dijo la canciller, se utilizó de manera que no era la predestinada. Y entonces, estamos en esta conversación: es un tema más de la relación bilateral. No es “el tema” ni muchísimo menos.
-M: Pero cuando no estemos grabando, me tenés que contar por qué todo el mundo le agarró con el swap este año.
-El swap es una obsesión argentina. ¿Qué pasó con el swap?
-Quirno: No es una cuestión transaccional. Nosotros, Argentina, busca relaciones duraderas, de largo alcance con el mundo. Inclusive China, como dijiste, es uno de nuestros mejores socios comerciales. Entonces en ese sentido hay un aspecto que, como hay proyectos bilaterales, hay cuestiones con el swap. Es también una situación directamente vinculada entre bancos centrales. No es cuestión del Ejecutivo y las condiciones serán conversadas entre ellos. Lo que sea lo mejor para los dos países. No hay un tema en esa situación.
-Pero hay que pagar el swap en los próximos meses.
-M: Por supuesto, como todas las otras deudas argentinas. ¿Deudas?
-Es la otra gran pregunta.
-M: Llevamos pagado en estos cuatro o cinco meses que lleva el Gobierno. Hemos estado cumpliendo con la totalidad de los compromisos. Cuando decimos que no hay déficit, ni siquiera incluye el déficit financiero. Se han pagado capital e intereses. O al revés, debería ser interés, que es lo normal y capital de deudas asumidos en gobiernos anteriores. Hemos estado pagando, que esa es otra cosa que sorprende. Se habla de que el déficit se cumplió en base a no pagar deudas. Por ejemplo, con generadoras eléctricas, cuando estamos pagando deudas que tenían seis meses de antigüedad. El gobierno anterior dejó toneladas, pero…
Deudas nuevas y deudas viejas
-¿Es bastante normal que paguemos las deudas anteriores y las nuevas, no?
-M: Claro, pero entonces no te pueden decir «no pagaste enero» cuando los anteriores habían dejado sin pagar desde julio. Estamos pagando meses de anteriores más lo que ya corresponde a esta gestión. Entonces estás pagando doble.
-¿Pero entonces no penalizaron de alguna manera a las anteriores deudas para pagar a los nuevas deudas?
-Quirno: Nosotros estamos cumpliendo en tiempo y forma con todas las obligaciones. Cuando llegamos, no había un dólar en el Banco Central y a los diez días, teníamos que hacer frente a un pago de casi 1.000 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional y lo hicimos. A los otros diez días teníamos que enfrentar un pago de 1.500 millones de dólares de intereses a los bonistas privados. Lo hicimos. Y así seguimos pagando, durante todos estos casi cinco meses, todas las obligaciones, las obligaciones con los diferentes países, con China, con los diferentes inversores. Todo ha sido perfectamente claro .No es una cuestión de pagar o no pagar.
-M: Cuando decimos que el Gobierno no tiene déficit, quiere decir que ha pagado todo lo que tenía que pagar. Si no, tendría déficit. Si hubiera algo que no pagó, te hubiera quedado un déficit. Lo que me importa aclarar mucho -y me gustaría que lo pongas en negrita- es que estamos pagando deudas que dejó el gobierno anterior. A ver, no es la deuda pública que es, es muy grande y que se viene acumulando a lo largo de mucho tiempo. Pero había…
-M: Los importadores, la más clara, la más fácil.
-Quirno: ¿Cómo solucionamos? Justamente se pagó, no se entró. Se generó una solución creativa para abordar el problema. Era una irresponsabilidad increíble que el gobierno anterior dejó deudas impagas con importadores de 60 mil millones de dólares, además de dejar sin reservas al Banco Central. De todo eso nos hacemos cargo.
-M: Las generadoras en energía, que son cifras descomunales, hacía meses que no cobraban. Perdón, no es que hace meses que cobraban: venían cobrando con meses de atraso. Pongámoslo en esos términos, que es más correcto técnicamente. Siempre venían cobrando con atraso y lo tenemos casi casi al día. O sea, hemos pagado lo que correspondía más lo nuevo. El casi casi significa un mes y medio, dos, que es lo que tardas en revisar la factura.
Curiosidades chinas y los vulnerables
-Ustedes estuvieron con el vicepresidente chino, con el canciller, con el presidente del Banco Central, ¿qué les explicaron y qué les preguntaron? Cuáles eran las curiosidades?
-M: Creo que tenían muchísima curiosidad por entender el proceso de cambio que se estaba dando desde el punto de vista social, de por qué la sociedad estaba tan dispuesta a este reordenar la forma de trabajar. Creo que eso fue bastante habitual. Preguntaron mucho sobre la reducción de la inflación, preguntamos mucho sobre la reducción de tasa de interés. Nosotros estábamos ansiosos por poder contar, cómo se estaba manejando y por qué estaba reduciéndose la inflación, la tasa de interés, etcétera. Así que esa fue la conversación.
-Quirno: Y muy interesados en que sus empresas participen del proceso de inversión en Argentina.
-¿Y no les preguntaron, como el Fondo Monetario, por los vulnerables del sistema argentino?
-Quirno: No, no preguntaron. Porque justamente China forma parte del Fondo Monetario Internacional también. Así que tiene la misma, la misma información que nosotros.
-Ahora China ha reducido las importaciones de carne y de soja últimamente. ¿Cómo lo van a resolver cuando Argentina más lo necesita?
-M: En realidad no es que ha reducido las importaciones. En nuestras importaciones totales chinas, ellos van cambiando de proveedor. En este momento ellos tienen una provisión de carne que proviene de Brasil.
-Sí, de Australia y de Paraguay.
-M: Pero sobre todo de Brasil, ¡con un precio muy bueno!….