Un aspecto importante es que Este porcentaje sólo fue superado por el expresidente Danilo Medina, quien ganó la reelección en 2016 con más del 61%.
En estas elecciones, el tres veces expresidente Leonel Fernández (La Fuerza del Pueblo) quedó en segundo lugar (28,84%) al igual que en 2020. El tercer lugar fue para Abel Martínez (Partido de la Liberación Dominicana), exalcalde de Santiago de Los Caballeros, quien obtuvo el 10,39%.
Observadores y analistas internacionales coinciden en resaltar el clima de civismo e institucionalidad en los comicios dominicanos, en los que también resultaron electos 32 miembros del Senado, 31 provincias y del Distrito Nacional, y 190 miembros de la Cámara de Diputados.
El 21 de mayo, la Misión Electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA), presidida por el expresidente chileno Eduardo Frei, presentó un informe de 39 páginas, entregado el 21 de mayo. La organización destacó que hubo mejoras con relación a las elecciones municipales del 18 de febrero de este año, pero insistió en que fallas como el proselitismo y la compra de votos debe ser corregido.
«Aunque persisten desafíos para futuras elecciones, incluyendo flagelos estructurales como la compra de votosla Misión constató mejoras significativas en la realización de las elecciones del domingo 19 de mayo. Se ha fortalecido la institucionalidad electoral del país y, con ella, la democracia dominicana”, enfatizó la Misión Electoral de la Organización de la OEA.
Por su parte, los miembros de la Misión de Observación Electoral (MOE) de la Iniciativa Democrática de España y las Américas (Grupo IDEA) también se refirieron al espíritu democrático de la contienda.
“Destacamos como prometedores, junto al apoyo de los partidos como soportes institucionales de la democracia, la creciente presencia y activismo de las generaciones más jóvenes y de reemplazo, especialmente en el ámbito de la facilitación de los debates preelectorales, la observación y el control electoral. Subrayamos, por tanto, la importancia de los debates presidenciales para que los dominicanos no sólo puedan votar sino esta vez elegir de manera informada», dijo el Grupo IDEA en un comunicado.
proceso pacífico
Berlaminio Ramírez, politólogo y consultor dominicano, dice a DIARIO LAS AMÉRICAS que “el comportamiento de los actores en conflicto se vio frenado, en cierta medida, por la presencia de la observación internacional y la observación de la sociedad civil que estaba con los ojos abiertos en todos los recintos”.
Asevera que el proceso electoral dejó elementos positivos y elementos negativos.
“Fue la campaña electoral más pacífica de la historia del país, por un lado. Y, por otro lado, en todos los partidos salieron a relucir jóvenes que deben ser los dirigentes del futuro, esos son dos grandes logros”, afirma.
Para Ramírez, entre los puntos negativos del proceso electoral está la abstención. Según datos oficiales, la abstención rondó el 37,98%, sólo superada por las elecciones generales del 5 de julio de 2020, que se desarrollaron en el contexto de la pandemia de COVID-19.
“Esto representa una amenaza y un gran desafío para la legitimidad de la democracia, la indiferencia de los ciudadanos que no tienen interés en participar y elegir a sus autoridades”, indica.
El politólogo también lo califica como un punto muy negativo y vulnerable en el marco de elecciones de República Dominicana estuvo representado por el transfuguismo.
“Un porcentaje significativo de los alcaldes y concejales elegidos el 18 de febrero en las urnas de la oposición se pasaron al partido gobernante antes de prestar juramento. Eso nunca había sucedido en la historia del país. «Esto es una mancha en el triunfo de Luis Abinader, no tenía necesidad de recurrir a eso, dependiendo del porcentaje con el que ganara, podía ganar estimulando una compra excesiva de alcaldes y concejales de oposición», enfatiza Belarmino Ramírez.
El politólogo agrega que la compra de papeletas y votos se repitió, pero en menor medida que en las municipales por el trabajo de la Junta Central Electoral.
“Los recintos estaban mejor vigilados, no podían montar carpas frente a los recintos, lo que hacían era buscar casas cercanas para hacer los operativos de compra de cédulas y votos, pero a grandes rasgos era un partido democrático”, dijo. indica.
Los desafíos de Luis Abinader
“República Dominicana ha escrito hoy una página de progreso democrático y los resultados hablan por sí solos (…) El pueblo ha hablado claro… Asumo la confianza que he recibido y la obligación de no decepcionar. «¡No te fallaré!» dijo el presidente. Luis Abinader tras su reelección.
El presidente anunció una reforma constitucional, para impulsar los cambios que dijo que requiere la sociedad, y una reforma en el ámbito fiscal. Abinader no dio detalles, pero aseguró que no volverá a ser candidato. La Constitución sólo permite postularse de forma continua durante dos mandatos.
“No volveré a ser candidato, es mi palabra, es mi compromiso y será parte de mi legado a República Dominicana”, aseguró.
«En República Dominicana No es necesaria una reforma de la Constitución. El presidente Luis Abinader dijo que lo va a hacer, pero el país no lo necesita y hay algunos aspectos que se pueden resolver sin llegar, por ejemplo, el tema de la migración, el Código Penal, el aborto y el derecho a la vida. . ”, dice el politólogo Berlaminio Ramírez.
Entre los imperativos que tiene Abinader está la situación de la migración ilegal procedente de Haití.
“República Dominicana va a tener que invertir mucho para controlar esa inmigración descontrolada (…) Hay sectores ahora mismo que alientan al gobierno a tomar medidas extremas”, dijo Daniel Pou, politólogo y especialista en políticas públicas de seguridad ciudadana, a el AFP.
El presidente expresó, tras su reelección, que la situación de Haití es de revisión permanente: «Dedico un tiempo importante todos los días de mi administración a monitorear los asuntos haitianos porque es necesario».
En este sentido, el presidente Luis Abinader sostuvo que mantendrá las redadas y deportaciones de su primer gobierno, con mayor presencia militar y la ampliación del muro fronterizo. Este muro tiene 164 kilómetros de largo y fue construido para prevenir la migración ilegal, el crimen y el contrabando.
FUENTE: AFP, Listín Diario, Diario Libre, OEA, Grupo IDEA