El encuentro entre Martín Llaryora y Javier Milei el pasado 19 de diciembre en la Casa Rosada marcó el inicio de una relación que se tornó distante tras los cruces de febrero, tras la caída de la «ley ómnibus». Sin embargo, la visita del Presidente a Córdoba el pasado sábado trajo consigo una reunión a solas con el gobernador, dejando abierta la posibilidad de una modificación en esta relación.
Tras el acto en la Plaza San Martín, Llaryora y Milei se reunieron en el Centro Cívico, donde mantuvieron una charla sin testigos. Funcionarios cercanos aseguraron que ambos salieron sonrientes y satisfechos por el diálogo, aunque se mantuvo hermetismo sobre los detalles de la conversación.
Durante la estadía del Presidente en la ciudad, se aseguró de tener cerca a su hermana, Karina Milei, excepto en la reunión con Llaryora. Aunque no se abordaron temas de gestión durante el café compartido en el Salón Rojo del Cabildo, se especula que se trataron temas pendientes entre la Provincia y la Nación.
Llaryora mencionó la posibilidad de conseguir financiamiento internacional para finalizar obras públicas nacionales paralizadas, como la autovía Río Cuarto-Holmberg. También se refirió a la necesidad de coordinar con los intendentes para concluir obras en ciudades y comunas, en un esfuerzo conjunto para ayudar al Gobierno nacional.
En definitiva, la reunión entre Llaryora y Milei abre la puerta a una posible colaboración en la finalización de obras públicas pendientes, demostrando la importancia del diálogo y la cooperación en beneficio de la comunidad.