El presidente ucraniano pasó el fin de semana manteniendo conversaciones en Roma, Berlín y París, y también se reunió con el Papa en el Vaticano.
El presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy realizó una visita sorpresa a París para conversar el domingo por la noche con el presidente francés Emmanuel Macron, extendiendo una gira europea de varias escalas que ha suscitado nuevas promesas de apoyo militar mientras su país se prepara para una contraofensiva contra las fuerzas de ocupación rusas.
Francia envió un avión para recoger a Zelenskyy en Alemania, donde se reunió el domingo con el canciller Olaf Scholz. La oficina de Macron dijo que los dos líderes sostendrán conversaciones durante la cena y que Macron “reafirmará el apoyo inquebrantable de Francia y Europa para restablecer Ucrania en sus derechos legítimos y defender sus intereses fundamentales”.
También discutirán las necesidades militares y humanitarias de Ucrania y “las perspectivas a más largo plazo para un retorno a la paz en Europa”, dijo la oficina de Macron.
Francia ha suministrado a Ucrania una variedad de armamento, incluidos sistemas de defensa aérea, tanques ligeros, obuses y otras armas y equipos y combustible. El primer ministro y el ministro de Relaciones Exteriores de Francia saludaron a Zelenskyy desde su avión que aterrizó en las afueras de París, y desde allí lo llevaron a la ciudad con escolta policial.
Antes de volar a París, Zelenskyy discutió la contraofensiva planeada de su país con Scholz en Berlín. Zelenskyy dijo que su objetivo será liberar las áreas ocupadas por Rusia dentro de las fronteras internacionalmente reconocidas de Ucrania, y no atacar el territorio ruso.
A principios de este fin de semana estuvo en Roma, y también en el Vaticano.
Los medios de comunicación estadounidenses sugirieron que Zelenskyy había considerado tratar de capturar áreas en Rusia para su posible uso como moneda de cambio en las negociaciones de paz para poner fin a la guerra iniciada por Moscú en febrero de 2022. Esto lo pondría en desacuerdo con los gobiernos occidentales que han insistido en que las armas proporcionan no deben utilizarse para atacar objetivos en Rusia.
Cuando se le preguntó sobre el informe, Zelenskyy dijo: “No atacamos territorio ruso, liberamos nuestro propio territorio legítimo”.
“No tenemos ni el tiempo ni la fuerza (para atacar a Rusia)”, dijo, según un intérprete oficial. “Y tampoco tenemos armas de sobra, con las que podríamos hacer esto”.
“Estamos preparando un contraataque para las áreas ocupadas ilegalmente en base a nuestras fronteras legítimas definidas constitucionalmente, que son reconocidas internacionalmente”, dijo Zelenskyy.
Entre las áreas aún ocupadas por Rusia se encuentran la península de Crimea y partes del este de Ucrania con poblaciones principalmente de habla rusa.