Un mundo que corre es un mundo feliz.
Eliud Kipchoge
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«Mira, ahí está Bekele», le grita un padre a su hijo.
Y Kenenisa Bekele (41) levanta los brazos y saluda a la parroquia, saluda como una estrella de cine o como el líder de una banda de rock.
Y el público lo aplaude.
Todo el mundo le aplaude, miles de personas le miran, incluso Joshua Cheptegei (27), el nuevo jefe de la tribu al fondo, el ugandés que ha arrebatado los récords de 5.000 y 10.000 a Bekele, el etíope, y que ahora debuta como un maratonista.
Lo viviremos este domingo, en el maratón de Valencia, allí competirán tanto Bekele como Cheptegei, y por eso estoy ahora aquí, sentado ante los iconos, contemplándolos en el escenario, en La Placeta de ExpoDeporte de Valencia.
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El padre le dice a su hijo que Bekele juega en League of Legends, pero Bekele lucha por aferrarse al pasado.
Me refiero a aquellos años de gloria, los primeros de este siglo XXI, cuando el etíope que flotaba en tartán y barro lo ganaba todo en todas las distancias en la pista, los 3.000, los 5.000, los 10.000, incluso récords mundiales y títulos olímpicos. Vendrían títulos mundiales de cross country (hasta once, entre carrera corta y larga), antes de ver cómo los tendones de Aquiles se cebaban con su estilo.
Pues todo eso de flotar entre barro y tartán tiene un precio.
–Si no hubiera sido por esas lesiones… –me dice Bekele cuando hablamos aparte.
Mi carrera en la pista quedó incompleta; Creo que tuve que parar a los 28 años por mis tendones”
Kenenisa Bekele es pequeño y flaco como yo y tiene unos ojos muy grandes y es accesible a su manera, nunca diría que este tipo sencillo, antes opaco a la prensa, hoy hombre de familia, hombre de negocios, millonario en África, de 41 años. -viejo soñador que sigue soñando como un niño, eso es lo que es.
Bekele es un deportista único en su historia y por eso Carlos Domingo, maestro de ceremonias de ExpoDeporte, cuando procedía a presentar el mito, se quedó un rato cantando su currículum y luego se detuvo y dijo:
–Es que si tengo que enumerar todo su palmarés, ocuparé toda la rueda de prensa.
(…)
Cuando charlamos a solas, le pregunto a Bekele:
–¿Qué hubiera pasado si no hubieran aparecido esas lesiones en los tendones?
–En la pista, mi carrera estuvo incompleta (eso me dice el triple campeón olímpico que ostentaba los récords mundiales de 5.000 y 10.000…). No podía volar tanto como podía. Piensa que, con 28 años, tuve que parar. Sucedió después de aquel Mundial de Berlín de 2009, cuando hice otro doblete (ganó los 5.000 y los 10.000). Me dolían los tendones y el dolor se estaba trasladando a otras zonas. Empezaron a subirme por las caderas, me interrumpieron. Creo que sin ellos podría haber ido aún más rápido. Y te diré algo más.
–…?
–No estoy contento con cómo me han quitado mis discos. La tecnología no me ayuda.
-¿Qué quieres decir?
–Me refiero a la luz de colores que acompaña al corredor que busca un récord, ese halo que avanza a su lado sobre el ring de la pista (así voló Cheptegei hacia los récords de 5.000 y 10.000). World Athletics debería establecer una doble lista, la de récords humanos, como la mía, y la de récords tecnológicos, como los que se están superando ahora. Por no hablar de las zapatillas.
-El zapatillas magicas ?
–Tienen una placa de carbono en la plantilla. ¿Sabes qué es eso? En ellos ganas un segundo por vuelta. ¡Un segundo por vuelta! Ahora, calcula cuál sería mi marca en 10.000 si los hubiera tenido en mi mejor momento.
(En 2005, Bekele consiguió registrar 26m17s53; si le restamos un segundo por vuelta obtenemos unos sorprendentes 25m52s53; hoy, el récord mundial de Cheptegei es 26m11s00…).
–Y si quieres, también hablamos de lo que estoy viendo en el maratón –añade.
Y aquí te pregunto:
–¿Cómo te ves de cara a la carrera de este domingo en Valencia?
–Lo he estado preparando, te lo aseguro. Pero he perdido tres meses por culpa de las lesiones, agobiado tras el maratón de Londres, y calculo que he llegado a mi 80%. Esta vez no esperes ninguna hazaña de mi parte.
(Actualmente, Bekele tiene el tercer mejor tiempo de la historia, con 2h01m41s).
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