El 25 de mayo es una fecha emblemática para los argentinos, un día de celebración y tradición que se vive con asados, empanadas, vino y música de tango. Sin embargo, en un rincón de Dinamarca, a más de 12 mil kilómetros de distancia de Argentina, también se festeja esta fecha patria de una manera única y especial.
En la localidad de Farum, cerca de Copenhague, un grupo de dano-argentinos se reúne para celebrar el Día de la Revolución de Mayo con un asado criollo, cerveza Carlsberg, torta y café. Las banderas argentina y danesa ondean juntas en este evento que reúne a personas de ambas nacionalidades, cantando los himnos de Argentina y Dinamarca en armonía.
La Asociación Argentina en Dinamarca, fundada en 1946, es la encargada de organizar este encuentro anual que reúne a más de 100 miembros. Esta asociación busca promover la cultura argentina en Dinamarca a través de diversas actividades y proyectos, siendo el asado patrio de mayo uno de los eventos más populares.
En este espacio multicultural, donde conviven el español y el danés, los idiomas fluyen naturalmente entre los asistentes, muchos de los cuales son parejas mixtas o familias biculturales. La integración de los argentinos en la sociedad danesa es un proceso que se ha desarrollado a lo largo de décadas, donde el aprendizaje del idioma y la adaptación a la cultura local son fundamentales.
Personajes como Rubén e Ilda, una pareja que emigró a Dinamarca en 1996 en busca de nuevas oportunidades, son ejemplos de la diversidad y riqueza cultural que se vive en este país nórdico. Para ellos, ser argentinos en Dinamarca y daneses en Argentina es una experiencia enriquecedora que les permite enriquecerse mutuamente con ambas culturas.
En este 25 de mayo no tan diferente, la comunidad argentina en Dinamarca se reúne en torno a un asado, comparte risas, cantos y momentos de camaradería. La música de tango, las empanadas y el vino son los protagonistas de esta celebración que mantiene viva la identidad argentina en tierras lejanas. Una muestra de que la patria es donde está el corazón, y que la unión y el amor por las tradiciones trascienden fronteras y distancias.