Después de lograr la clasificación matemática para los octavos de final de la Liga de Campeones, el Barça afronta un partido vital. Un partido ante un rival directo que tendrá mucho peso en el campeonato liguero. Enfrente, un Atlético de Madrid en gran forma. Aquí tenéis mis 5 claves tácticas para este gran juego:
1.- Cancelo y el papel de João Félix
Con De Jong y Pedri ya con un par de partidos en su haber y con el tema Ter Stegen aún sin resolver, Xavi hará pocos o ningún cambio en el once respecto a la jornada del Oporto. Quizás la única incógnita sea si Koundé y Araujo intercambiarán puestos o si Christensen sustituirá al francés. Cancelo seguirá por la izquierda y más metido en el juego de construcción que en el inicial (última novedad táctica). En este sector, el portugués mostró mucha complicidad con otro gran protagonista del partido de esta noche: Joao Félix. Partido muy especial para él. En lo futbolístico, será interesante si Joao sabe encontrar ese punto intermedio en el posicionamiento para generar dudas sobre quién debe encargarse de su marcaje: el lateral derecho (Nahuel o Marcos Llorente) o el central derecho (Azpilicueta).
2.- Sal de presión y ve al lado contrario:
El Atlético es uno de los equipos que mejor domina la activación selectiva de la presión. O lo que es lo mismo, puede presionar muy bien cualquier área que se proponga hacerlo. A partir de ello y, en función de sus necesidades, varía las alturas y zonas en las que se lanza a la acción. Será trascendental que el Barça sepa interpretar estos momentos y, más aún, que sepa salir de ellos con videncia. Otra cosa relevante será que, cada vez que puedas hacerlo, tengas claro que el espacio libre para atacar será en el lado contrario. Estas dos maniobras combinadas crean muchos problemas al Atlético. No son acciones fáciles pero son una de las mejores formas de generar ocasiones.
3.- Disparos de frente:
Por su forma de jugar (5-3-2) y de defender cuando el rival se acerca al área, los colchoneros dejan una zona muy libre: los alrededores del área grande. Y cuando el rival logra empujarlos cerca de su área, el centrocampista se suma a la defensa de cinco para defender el área. Esto quiere decir que sólo quedan dos centrocampistas para cubrir toda la zona exterior y eso permite mucho espacio. Algo que facilita mucho las patadas de media distancia. Tanto es así que el 42% del total de remates que recibe el Atlético de Madrid son de frente o más allá. El segundo equipo que más recibe sólo por detrás del Madrid. El Barça tiene que explotarlo mucho hoy. Oportunidad clara para Raphinha, Pedri o Joao Félix, jugadores con buen tiro exterior.
4.- Saca a los centrales y sé fuerte en los duelos:
Sacar de zona a sus centrales es una de las maniobras que puede ayudar mucho al Barça a atacar mejor. Y para ello tiene que haber movilidad en la cima. En primer lugar, una buena variedad de extremos. Y luego, ofertas de espacio para los pies y diagonales de Lewandowski. Además, será fundamental para los blaugranas tener regularidad en los duelos individuales. Porque el Atlético es un equipo que lleva a muchos mano a mano o segundas jugadas.
5.- Griezmann, la profundidad de Morata y Lino
El exjugador del Barcelona está realizando una temporada espectacular. Ha encontrado un contexto ideal para sacar a relucir sus mejores cualidades. Jugando en ataque como segundo delantero pero con absoluta libertad, le aporta más presencia en el juego (interviene casi 10 veces más en el juego que la temporada pasada), más dinamismo y la misma presencia en el área. Además, es dulce al final. Marcó trece goles y una asistencia entre Liga y Champions. Cerca de él, Álvaro Morata. Otro jugador que se encuentra en un estado de forma espléndido y que se encarga de inmovilizar a los centrales rivales y realizar interesantes escapadas en diagonal. Él es muy bueno en eso. Doce goles y dos asistencias certifican que está a un gran nivel y que, ahora mismo, tienen la mejor pareja ofensiva de la Liga en cuanto a números. También destacará a Samuel Lino en la banda izquierda. El atacante brasileño se ha adaptado notablemente a la posición de lateral, ha ganado profundidad y, con una media de 1,40 por partido, es el colchonero que más faltas provoca en campo rival