Compromete a los 13 partidos antichavistas. Apoya la alternancia en el poder y el abordaje de la crisis humanitaria, entre otros puntos del documento.
Los trece candidatos a las primarias opositoras venezolanas firmaron un programa de gobierno común, que representa una apuesta de unidad y fortaleza con la que pretenden derrotar al régimen de Nicolás Maduro a pesar de sus amenazas y represión contra los líderes disidentes.
La comisión nacional de primarias, presidida por Jesús María Casal, convocó el pasado viernes al acto unitario de los candidatos opositores pese a la embestida del chavismo y los obstáculos que enfrenta para organizar las elecciones internas de la oposición, prevista para el 22 de octubre.
La candidatura que gane los reclusos para ser el abanderado presidencial de 2024 deberá incluir en su oferta electoral los “Principios Comunes del Programa Mínimo de Gobierno de cambio, Unidad y reconstrucción nacional”, documento que prioriza la atención del complejo de emergencia humanitaria , la atención a las poblaciones más vulnerables y el firme propósito de no reelección.
El programa común de gobierno plantea entre sus principales directrices la necesidad de «un plan nacional» frente a la “crisis humanitaria”, centrada en la alimentación, la salud y la educación; así como la «reanudación» del papel del país como «proveedor de energía segura» tras el colapso de su industria petrolera.
Por otra parte, subraya, en materia política, on “compromiso con la alternabilidad y el principio de no reelección presidencial”según varios sitios de prensa digital local que han comentado la iniciativa.
Los aspirantes a ocupar la silla del palacio presidencial de Miraflores coincidieron en que con el acto se avanza en la unidad necesaria para derrotar al chavismo en las elecciones presidenciales de 2024.
Y ratificaron la defensa del proceso electoral interno como la herramienta para unificar la oferta electoral a la ciudadanía y que debe concretarse a pesar de las trabas que impone el poder político, señala el portal Efecto Cocuyo.
De los trece candidatos opositores, hay tres descalificados injustificada y arbitrariamente por el régimen chavista, como son los precandidatos María Corina Machado, Henrique Capriles y Freddy Superlano. Pero el más perseguido y atacado es Machado por ser quien lidera las últimas encuestas de preferencia en la intención de voto.
El presidente de la comisión de primarias, Jesús María Casal, ha dado su apoyo a los inhabilitados. Aseguró que si gana las primarias, uno de los injustamente proscritos “tendrá que allanar el camino” para que sea el candidato presidencial de toda la oposición, para que todo el resto de la disidencia se sume a la columna y lo apoye sin ningún tipo de condiciones.
“Si se presenta esta situación, entonces tendremos que enfrentar estas inhabilitaciones y tratar de allanar el camino para que este elegido por la ciudadanía pueda finalizar su inscripción para las elecciones presidenciales”, dijo Casal en declaraciones a periodistas en Caracas.
A pesar de esta nueva etapa en la que entra la oposición, Diosdado Cabello, segundo al mando de los chavistas y vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), no deja de lanzar dardos amenazantes al favorito de la disidencia antichavista. . “María Corina no ganará las primarias”, declaró Cabello, como si fuera el árbitro de las mismas.
Otro atacante chavista es el gobernador de Trujillo, Gerardo Márquez, quien llama a «perforar» a María Corina Machado si va a ese estado del interior de Venezuela.
“El día que en Pampanito, en este municipio que yo considero el más chavista del estado Trujillo, cuando vean aquí a una María Corina, la tenemos que sacar a la fuerza de aquí”, amenaza el gobernador Márquez.
La libertad sindical también es reprimida por el chavismo. Alcides Bracho, Gabriel Blanco, Emilio Negrín, Reynaldo Cortés, Néstor Astudillo y Orlando Meléndez fueron condenados a 16 años de prisión por protestar por los bajos salarios.
Los candidatos a primarias, entre ellos María Corina y Andrés Velásquez, han repudiado la sentencia contra los sindicalistas. El salario mínimo de hambre que reciben unos 5 millones de pensionados y jubilados es de 4 dólares mensuales, que es la principal causa del éxodo y motivo de protestas.
Unos 7,3 millones de venezolanos han huido. La ONG Provea dijo que esta sentencia es «una condena brutal» y viola la libertad sindical, trata de inhibir la protesta social y muestra a los patrones del gobierno contra los trabajadores.