Con el título de «Periódico silenciados», artículo del diario Die Tageszeitung (TAZ) se hace eco del cierre de el periódico en guatemala «Hasta siempre» puso la portada de el periódico, junto a una decena de los titulares más destacados de los 26 años de un periódico investigativo y sumamente incómodo. Y publicó un último artículo sobre la ‘criminalización de la pluma crítica’; la pluma del fundador y editor, José Rubén Zamora. Zamora enfrenta un juicio por lavado de dinero y se describe a sí mismo como un ‘preso político’. Con razón, según la Asociación de Periodistas Guatemaltecos que, al igual que los activistas de derechos humanos, atribuyen motivos políticos al proceso contra Zamora. Consideran que Zamora está en la mira por su lucha contra la corrupción. El Comité para la Protección de los Periodistas, con sede en Nueva York, responsabilizó al gobierno guatemalteco por el proceso, que el periódico no sobrevivió (…)
Demasiado crítica, la redacción se había acercado demasiado al ‘Pacto de los Corruptos’, una red de políticos, militares, crimen organizado y empresas que, mientras tanto, dirige el país, según un exeditor de yélPeriódico, Marvin del Cid: ‘Este es un duro golpe a la libertad de prensa, que le hace el juego a los grupos mafiosos en Guatemala’. El abogado alemán Michael Mörth, quien vive en Guatemala desde principios de la década de 1990 y ha observado de cerca la evolución política del país, lo ve de manera similar: ‘El final de este proyecto marca el colapso de la democracia y la libertad de expresión. prensa, y representa el triunfo del Pacto de los Corruptos y, por tanto, del pasado. Para el periódico, es definitivo. Solo podemos poner todo de nuestro lado para que no sea malo también para la democracia y nuestra esperanza para otro país’. El 25 de junio habrá elecciones presidenciales en Guatemala. El análisis crítico de el periódico será necesario».
«Emerge un régimen dictatorial»
El periódico Berliner Zeitung Por su parte, publica una entrevista a Jordán Rodas Andrade, cuya candidatura a la vicepresidencia de Guatemala -como compañera de fórmula de Thelma Cabrera- fue cuestionada.
Andrade, que vive exiliada en España, respondió así a la pregunta de si las elecciones del 25 de junio cumplirán con los estándares democráticos: «No. Ya ahora, antes de las elecciones, hay fraude. A Thelma Cabrera, que en las elecciones cuatro Hace años obtuvo el cuarto lugar y a mí mismo se me niega el derecho a ser candidato, y eso sin que un tribunal se pronuncie en mi contra”. (…)
También se le preguntó qué actitud debe adoptar la comunidad internacional ante las elecciones, e indicó: “Las exhortaciones y las condenas están bien, pero ya no son suficientes. En Guatemala estamos ante el surgimiento de un régimen dictatorial. El 12 de mayo, por ejemplo, fue otro día triste para la democracia guatemalteca. El periódico anunció que tenía que cerrar. Su fundador, Rubén Zamora, periodista reconocido internacionalmente por sus reportajes de investigación sobre casos de corrupción en varios gobiernos, es perseguido. La libertad de prensa está cada vez más restringida, y esto es justo antes de las elecciones. Hoy la situación en este sentido es peor que nunca desde la restauración de la democracia en 1986. Eso debería hacer saltar las alarmas”.
La ‘muerte cruzada’ en Ecuador
Por su parte, el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung publica un artículo sobre la decisión del presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, de disolver la Asamblea Nacional: «El mecanismo, conocido como ‘muerte cruzada’, está contemplado en la Constitución ecuatoriana. Habilita al presidente para disolver el Parlamento cuando considere que obstruye la capacidad de gobernar. Sin embargo, la medida exige la convocatoria de elecciones parlamentarias y presidenciales, en las que el presidente también podría perder su cargo. Por eso se habla de una ‘muerte cruzada’. (…)
Guillermo Lasso.
Se perfilaba la disolución del Parlamento, porque se produjo en medio de un proceso de juicio político contra el conservador Lasso. La oposición, con mayoría parlamentaria, acusa al presidente de una supuesta malversación de fondos públicos (…) Si bien la comisión de vigilancia había recomendado no seguir adelante con el proceso de juicio político, por falta de pruebas, el Parlamento decidió continuarlo. Se consideró probable que la mayoría de dos tercios necesaria para destituir al presidente se hubiera reunido en el Parlamento.
(EM)