El Barça sigue ganando, disfrazado de faquir para no quemarse con las piedras ardientes que la Euroliga le tenía preparadas en las tres primeras jornadas. Derrotado al Efes en el Palau, conquistando el Pireo a lo grande, este martes el equipo Grimau se anotó otra victoria de esas que suenan fantásticamente bien al ganar en el siempre caluroso Stark Arena de Belgrado a un Partizan que promete mucha guerra esta temporada.
No hubo rastro de cansancio en los jugadores del Barça, que en menos de una semana han cruzado dos veces Europa, volando desde Atenas a Canarias y de regreso a Belgrado. Pero lo han hecho de victoria en victoria y eso siempre ayuda a hacer la maleta y mantener las piernas ligeras.
La de Belgrado es la octava victoria consecutiva que firma el Barça, sobre todo un campeón de Europa como el Partizán, que suma a su gran plantilla la presencia de la leyenda Obradovic en el banquillo. Todas fueron lecturas positivas para los blaugrana, que siguen borrando el mal recuerdo que les deja el Stark Arena, donde hace dos años perdieron ante el Real Madrid en la final a cuatro, y a su vez minimizaron a Kevin Punter, que había dado su visto bueno. este verano a los rectores del Palau y acabó denegando la mayor y continuando en Belgrado.
El Barça completó un partido magnífico, asumiendo el mando desde el principio y esquivando las embestidas serbias, sobre todo en el tercer cuarto. Una tarea en la que colaboró especialmente Nicolás Laprovittola con sus seis triples.
Los blaugrana alcanzaron sus primeras ventajas cómodas en el primer cuarto (10-19) con un Da Silva muy inspirado que siempre respondió a Koprivica. Un mal comienzo del segundo cuarto permitió al Partizán adelantarse brevemente en el marcador, pero los de Grimau calentaron y con cinco triples en los últimos cuatro minutos se pusieron por delante (34-44 al descanso).
El Partizán amenazó con reaccionar saliendo del vestuario con un Dozier que había estado ausente en acción y que se encargó de las operaciones para anotar cinco puntos seguidos que calentaron el Stark Arena. Pero su cuarta falta personal fue un desastre y, aunque Nunnally tomó el relevo, el Barça se mostró rocoso y muy firme, sobre todo en el aspecto anímico, sin desplomarse en ningún momento a pesar de que el Partizán no les dejaba separarse en el marcador de sobra.
Dos tiros libres de Jokubaitis en el último cuarto marcaron el máximo de la tarde (60-71, minuto 31) y el partido se convirtió entonces en un tira y afloja. El Partizán marcó y el Barça siempre devolvió la moneda, con especial mención a la asistencia en el rebote de Jabari Parker (11), disputando sus mejores minutos como azulgrana. Y, tras más de dos horas de juego -alguien debería hacer algo al respecto antes de que la gente huya de los pabellones-, el Barça logró por fin su tercera victoria en esta Euroliga.
Ficha de datos
83. Partizan Belgrado (16+18+26+23): Dozier (13), Punter (11), Nunnally (14), LeDay (12), Koprivica (8) -equipo titular-, Kaminsky (5), Avramovic ( 11), Smailagic (9), Trifunovic (-), Andjusic (-) y Jaramaz (-).
92. Barça (23+21+25+23): Satoransky (4), Laprovittola (20), Kalinic (7), Da Silva (13), Vesely (12) -equipo titular-, Hernangómez (15), Jokubaitis ( 5), Abrines (5), Parker (9), Brizuela (2), Nnaji (-) y Parra (-).
Árbitros: Fernando Rocha (POR), Piotr Pastusiak (POL) y Arturas Sukys (LIT). Señalaron una antideportiva a los locales Koprivica (min.5) y Kaminsky (min.10), y eliminaron al visitante Hernangómez por cinco faltas (min.38).
Incidencias: partido de la tercera jornada de la Euroliga disputado en el Stark Arena de Belgrado.
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