El vicepresidente Victoria Villarruel firmó una resolución para crear una Comisión de Análisis Dotal (CAD) que Revisará toda la plantilla de empleados del Senado. Tienen 30 días para hacerlo.
Nada más asumir el cargo, Villarruel anunció que haría una auditoría. Pero como dicen, encontraron «casos extraños» que merecen un estudio más profundo y exhaustivo.
«Hubo nombramientos de empleados contratados que se convirtieron en empleados temporales y empleados permanentes, todo en el mismo acto el año pasado. También «Gente a la que le pagaron con una tobillera electrónica porque está siendo procesada»señalan desde el oficialismo de la Cámara Alta.
Van a revisar nombramientos permanentes, en categorías altas del escalafón, que no cumplieron con los requisitos de la ley, como idoneidad y vacancia. También los traslados por resoluciones consecutivas de personal bajo la modalidad de «contrato de servicios», a la calidad de «temporal» con el fin de otorgarles una plantilla permanente.
«Es un desastre transversalmente» señalan, sin señalar ningún banco o zona concreta.
La resolución establece que la comisión estará integrada por la secretaría administrativa que comanda María Laura Izzoel subsecretario administrativo, el subsecretario de coordinación operativa, la dirección de recursos humanos y la dirección general de asuntos jurídicos.
La idea es que después de un mes de estudio completo la comisión emita recomendaciones para «optimizar el uso de los recursos humanos existentes», «promover una gestión eficiente y razonable de los recursos públicos, humanos y administrativos.»
Avanzan que los actos administrativos irregulares deben ser revocados o sustituidos por razones de ilegitimidad en cualquier momento en la sede administrativa.
Uno de los casos que había sorprendido este año fue el de una senadora de La Libertad Avanza: la jujeña Vilma Facunda Bedia, quien había designado en su despacho a sus hijos, a sus hermanos, a su sobrina y hasta a su nuera.
Por la presión que ejercen Javier Milei y Villarruel, en la Cámara Alta aseguran que Bedia ya ha «solicitado el despido de varios de sus empleados».
Los gastos del Senado fueron criticados la semana pasada después del escandaloso aumento salarial que votaron los propios legisladores: se incrementaron de 1,9 millones de dólares disponibles a 4,5 millones de dólares.
Tras las críticas, una parte del bloque del PRO solicitó ahora un llamado a sesión para votar la reversión del aumento de las dietas.
El kirchnerismo también pidió una sesión extraordinaria para el 2 de mayo. Quieren discutir su proyecto que establece que nadie en el Estado puede ganar más que el presidente
las auditorias Son un clásico de la gestión entrante. En 2020, Cristina Kirchner denunció a su antecesora Gabriela Michetti por «fraude a la administración pública y negociaciones incompatibles» en la gestión del Senado tras una revisión.