Los tailandeses comenzaron a votar el domingo (14.05.2023) en las primeras elecciones parlamentarias desde las protestas a favor de la democracia de 2020, en medio del rechazo al gobierno conservador pro-ejército, que según las encuestas podría perder ante la oposición progresista.
Desde las regiones montañosas del norte hasta las paradisíacas playas del sur, unos 95.000 colegios electorales abrieron a las 08.00 hora local (01.00 GMT) para unos 52 millones de votantes.
Los analistas anticipan una alta participación, alimentada por el deseo de cambio frente al lento crecimiento económico y la reducción de las libertades fundamentales.
El principal partido de la oposición, Pheu Thai, liderado por la hija del ex primer ministro Thaksin Shinawatra, espera pasar página tras casi una década de dominación militar, encarnada en el actual primer ministro Prayut Chan-O-Cha, de 69 años.
Sin embargo, el complejo sistema electoral ofrece al candidato de afiliación militar una cómoda ventaja, que podría mitigar una posible alternancia o incluso desencadenar un nuevo período de inestabilidad.
También es posible un escenario donde se refrenda la permanencia de los militares en el poder, en un reino acostumbrado a las intervenciones del ejército y la justicia en el proceso democrático.
El exgeneral Prayut, que llegó al poder tras un golpe de estado en 2014 y luego fue legitimado en 2019 por una controvertida votación, llega a esta elección en una posición débil tras haber sido desafiado incluso en su anterior coalición de gobierno.
Votantes tailandeses hacen fila para votar en Bangkok. Se espera una alta participación en las urnas. (14.05.2023)
El domingo será «un día histórico en el que Tailandia pasará del poder de la junta a la democracia», dijo el viernes Paetongtarn Shinawatra, de 36 años, el candidato favorito en las encuestas, bajo la bandera roja de Pheu Thai.
El sistema electoral obliga a la oposición a obtener 376 de los 500 escaños de la Cámara de Diputados para evitar el peso del Senado (250 senadores), que también participa en la designación del primer ministro y cuyos miembros son designados por el ejército.
Shinawatra se beneficia de la popularidad de su padre Thaksin Shinawatra, primer ministro de 2001 a 2006, que vive en el exilio para evadir una condena por corrupción.
gs (afp, ap, Reuters)