China ha expresado una creciente preocupación por la estabilidad regional tras el final de la misión militar estadounidense en el vecino Afganistán.
El líder de China, Xi Jinping, también habló el viernes con el presidente de Afganistán, Ashraf Ghani, e instó a su gobierno a alcanzar una solución política al prolongado conflicto del país y a «fortalecer la protección de seguridad de los ciudadanos y las instituciones chinas en Afganistán». Xi no mencionó a los talibanes, que han expandido constantemente las áreas que controla, según un comunicado que describe la llamada.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Pakistán sugirió el miércoles que la explosión que golpeó el convoy fue un accidente causado por la ignición de los botes de gas a bordo de uno de los vehículos. Otros funcionarios pronto sugirieron que había evidencia de un ataque deliberado. La reticencia inicial pareció reflejar la sensibilidad de Pakistán sobre los ataques terroristas en su territorio, especialmente los que tienen como objetivo un aliado poderoso.
El embajador de China en Pakistán, Nong Rong, quien en abril falló por poco un ataque terrorista en un hotel en Quetta donde se hospedaba su delegación, visitó el lugar del ataque del convoy el jueves.
Los medios estatales de China mostraron un video de los restos del autobús en el barranco del río y los escombros esparcidos por una carretera estrecha sin pavimentar, incluido un casco desechado del contratista, China Gezhouba Group. La fuerza de la explosión quemó árboles en la pendiente empinada sobre la carretera, dijo un reportero con CCTV en la escena.
El ataque al hotel en abril fue reivindicado por los talibanes paquistaníes, o Tehrik-i-Taliban Pakistan, que dijeron que sus objetivos previstos eran «locales y extranjeros» alojados en el hotel. Otro grupo llamado Ejército de Liberación de Baluchistán, en honor a la provincia del sur del país, también ha denunciado ataques contra los chinos.
Cui Jian, subdirector del proyecto con China Gezhouba Group, elogió a los trabajadores paquistaníes y al personal de seguridad por su respuesta de emergencia después del bombardeo. “El personal paquistaní todavía está muy unido y nos ha brindado mucha ayuda”, dijo en declaraciones que se muestran en CCTV.
Salman Masood informó desde Islamabad; Steven Lee Myers de Seúl. Claire Fu contribuyó con la investigación.