El Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) está en un callejón sin salida con el tema del maíz.
AMLO lanzó la veda de importación de maíz transgénico para 2023 sin ningún sustento científico, simplemente aventurándose a decir que es dañino, lo cual no ha podido justificar.
Esto levantó todas las alertas en Estados Unidos, y detonó una reunión de alto nivel en Washington, DC, a la que asistió el propio Secretario de Relaciones Exteriores, marcelo ebrard; el secretario de economía, Raquel Buenrostroel secretario de agricultura, Víctor Villalobos y el Secretario de Medio Ambiente, Luisa María Alboresentre otros funcionarios.
¿Qué tan grande debe ser la bomba atómica activada por AMLO para que una cuarta parte del gabinete tenga que viajar a Washington para negociar con el Secretario de Agricultura? Thomas J. Vilsakc y con el Representante Comercial, Katherine Tai? El problema de fondo es que Estados Unidos podría desencadenar un panel de resolución de disputas en el marco del T-MEC, con consecuencias desastrosas para México.
¿Cuál es el centro del problema? Que, si bien México es autosuficiente en producción de maíz blanco, con 23 millones de toneladas anuales, el costo de envío es gigantesco dentro de nuestro país, por lo que importar maíz blanco transgénico es la alternativa rentable.
Los datos no mienten: llevar una tonelada de maíz blanco producido en Sinaloa al sur de México cuesta en promedio 8,200 pesos; mientras que importar una tonelada de maíz blanco, vía marítima, desde Estados Unidos, cuesta sólo 6.600 pesos.
Incluso importar maíz blanco de Sudáfrica y llevarlo a la península de Yucatán o la región sureste es más barato que moverlo desde Jalisco o Michoacán. El problema es que los costos logísticos son prohibitivos dentro del territorio nacional. Además, la infraestructura es insuficiente porque no hay equipo ferroviario ni camionero para soportar la demanda.
López Obrador tendrá que averiguar qué quiere hacer con la inflación y el precio de las tortillas. Si su discurso es consistente en combatir la inflación, debería respetar las importaciones de maíz blanco de Estados Unidos, porque eso beneficia al consumidor y abarata los precios. En pocas palabras: la orden de prohibición de él es una tontería. Sin embargo, si quiere subirse al caballo y prohibir la importación de maíz blanco sin apoyo, entonces debe aceptar que los precios de la tortilla subirán hasta un 24 por ciento más en cuanto entre en vigencia su decreto proteccionista.
BANQUEROS
La ciudad de la próxima Convención Bancaria de la Asociación de Bancos de México, que preside daniel beckerestará en Mérida, Yucatán, gracias a la labor del gobernador mauricio villaque él insistió, facilitó y ejecutó.
POR CARLOS MOTA
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MBL
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