Paraguay es uno de los 14 países que reconoce a Taiwán como un país independiente. El único en Sudamérica. En el barrio Obrero de Asunción hay una estatua erigida en honor a Chiang Kai-shek, el líder que gobernó Taiwán desde la creación del país en 1949 hasta su muerte en 1975. Una relación de décadas que las elecciones presidenciales de 2023 han puesto en el centro de la escena y despiertan el interés mundial por un factor ineludible: el auge de China y su consolidación como principal mercado del mundo.
Si bien el vínculo con Taiwán ha sido tema de debate en Paraguay desde hace algún tiempo, fueron las declaraciones de campaña del candidato presidencial por la Concertación, Efraín Alegre, en las que expresó su desacuerdo por el tenor del enlace entre Asunción y Taipei los que colocaron el tema en el centro de la escena.
“Tenemos una visión crítica de las relaciones con Taiwán por una razón muy simple: eso significa renunciar a las relaciones con China, que es uno de los mercados más grandes del mundo. Entendemos que Paraguay, un país pequeño, está haciendo un gran esfuerzo en las relaciones con Taiwán y no vemos que suceda lo mismo en sentido contrario. Creemos que la relación que existe no es justa, y que la vamos a revisar en su momento», afirmó Días atrás Alegre a Clarín cuando se le preguntó sobre el asunto.
Las declaraciones de Alegre generaron una La respuesta inmediata de Taiwán. El vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores de Taiwán, Jeff Liu, afirmó que ambos países comparten una relación «larga y amistosa», recordó que el comercio bilateral entre ambos países ha ido creciendo en los últimos años, y pidió que «no crean en las falsas promesas de China.
Lo delicado del tema hizo que el candidato a presidente del Partido Colorado, Santiago Peña, también se viera obligado a aclarar su posición respecto a las relaciones con ambos países asiáticos.
“No tenemos ninguna restricción al comercio con China continental. De hecho, el país del que más productos compramos es China. Sin embargo, tenemos una relación diplomática con Taiwán desde hace más de 60 años. Se fundamenta en valores y principios democráticos, y creemos que la experiencia de Taiwán puede ser muy valiosa para un país como Paraguay”, dijo en entrevista con la AFP.
conflicto de intereses
El debate en Paraguay se da entre el sector ganadero y agrícola, que apoya el establecimiento de relaciones con China para poder introducir sus productos al país, y otro sector que favorece la relación con Taiwán, pues forma parte de una estrategia geopolítica para mantener buenas relaciones con Estados Unidos y países como Corea del Sur, Australia y Japón.
“Para los agricultores es una cuestión comercial: establecer relaciones con Beijing para vender allí sus productos. Para los sectores políticos vinculados al Partido Colorado, se trata de privilegiar la relación con Taipei, por una cuestión de apoyar la democracia frente a la autocracia”, afirma en un comunicado Rubén Ramírez, excanciller de Paraguay y actual titular de la consultora. diálogo con Clarín Trade Investment Paraguay (TIP).
Si bien el debate no es nuevo en Paraguay, la guerra en Ucrania le dio una nueva urgencia. Antes de la invasión de febrero de 2022, Rusia fue el principal destino de la carne paraguaya. Las sanciones internacionales, sin embargo, terminaron por cerrar esa opción, y ahora el sector ganadero busca con urgencia un nuevo destino masivo para sus productos.
Taiwán es actualmente el principal destino de la carne paraguaya, pero el tamaño de su mercado no es suficiente para cubrir toda su producción. El presidente de la Asociación Paraguaya de Productores y Exportadores de Carne (APPEP), dijo al diario Última Hora que la carne paraguaya es la de menor precio de todo el Mercosur, cerca de un 20% menos que Argentina, Paraguay y Uruguay, y que urge ampliar su mercado
“China representa actualmente el 34,4% de las importaciones totales de Paraguay, equivalentes a unos 1.200 millones de dólares. Es un proveedor muy importante de todas las importaciones, y con un déficit comercial sustancial. Estas variables hacen que exista una gran presión de los exportadores para establecer un diálogo con China, o en su defecto, que países aliados como Taiwán y Estados Unidos, entre otros, ayuden al país a acceder a mercados más importantes”, detalla Ramírez.
La mirada de Estados Unidos y Europa
El papel de China en América Latina y sus relaciones con los países de la región no es algo que preocupe no solo a Estados Unidos, sino también a Europa.
En 2021, Josep Borrell, alto representante de Política Exterior de la Unión Europea, lamentó que la UE hubiera descuidado su relación con América Latina, hasta el punto de que China había desplazado al bloque como segundo socio comercial de la región. En su presentación, pidió a los eurodiputados que ratifiquen el acuerdo Unión Europea-Mercosur, que había sido firmado en 2019.
La relación de Paraguay con Taiwán es tan sólida que en más de 30 años de democracia nadie, ni siquiera el gobierno de Fernando Lugo, ha insinuado la necesidad de cambiarla. Sin embargo, la realidad geopolítica y económica actual parece estar en camino de convertirlo en un tema que el país tendrá que debatir.
“No importa quién gane, este tema ya está instalado. Ya sea que Santiago Peña proponga dejar las cosas como están, o que Efraín Alegre decida romper con Taiwán y buscar un vínculo con China, las presiones y discusiones internas estarán a la orden del día”, completa Ramírez.
Asunción, enviado especial
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